Ecopetrol analiza el cierre de campos ante la fluctuación de los precios del petróleo

La estatal petrolera Ecopetrol se encuentra actualmente evaluando el posible cierre de algunos de sus campos de producción, una medida que se considera en respuesta a la reciente caída en los precios internacionales del petróleo. Esta decisión, según informa El Tiempo, surge a pesar de que los precios actuales son significativamente más altos que los observados durante la crisis de 2016.

En enero de 2016, el precio del barril de petróleo Brent se desplomó hasta situarse por debajo de los 28 dólares, lo que obligó a Ecopetrol a considerar el cierre de varios pozos. Ahora, aunque los precios superan el doble de esa cifra, la compañía vuelve a plantearse una estrategia similar debido a la presión ejercida por la volatilidad del mercado global.

El impacto de la guerra comercial y los costos de producción

El plan de inversiones de Ecopetrol para 2025 se elaboró tomando como referencia un precio de 73 dólares por barril de Brent. Sin embargo, la guerra comercial liderada por Donald Trump ha provocado que el precio actual se sitúe en torno a los 63 dólares. Ricardo Roa, presidente de Ecopetrol, ha manifestado que esta disminución obligará a la empresa a «descartar» aquellos campos cuyo punto de equilibrio se acerque a ese precio, concentrando los esfuerzos en aquellos con menores costos de producción.

«Ya hemos hecho esos análisis desde lo económico y lo técnico y lógicamente tendremos que reaccionar en la medida que las mismas condiciones de precio así nos obliguen», afirmó Roa, según informa Mauricio Galindo en El Tiempo.

Comparación con la crisis de 2016

En 2016, el criterio para determinar qué pozos cerrar se basaba en la siguiente premisa, según Juan Carlos Echeverry, entonces presidente de la compañía: «Podemos seguir funcionando, sin ningún problema, con precios de entre 20 y 30 dólares». En aquel momento, se consideraba cerrar aquellos yacimientos cuyos costos superaran dicho rango. Echeverry afirmaba que el precio al cual producían caja se situaba entre 20 y 30 dólares, y el nivel en el cual generaban utilidades, entre 30 y 40 dólares.

Si se ajustan esos valores a dólares actuales, el rango para operar sin problemas equivaldría aproximadamente a entre 25 y 38 dólares de 2025, un valor significativamente inferior a los 64 dólares por barril observados recientemente. Esta situación ha encendido las alarmas en la administración actual de la empresa.

El aumento del punto de equilibrio

Los reportes de Ecopetrol al mercado evidencian un aumento notable en su punto de equilibrio para generar utilidad neta por barril en los últimos dos años. En 2022, este valor se situaba en 31 dólares por barril, similar a lo observado en 2016. Sin embargo, para el año pasado, había aumentado a 49 dólares por barril. Este incremento del 58% en el punto de equilibrio en tan solo dos años justifica la posible decisión de cerrar pozos, tal como ha anunciado la compañía.

Análisis de los costos y la inflación

Un experto consultado por El Tiempo explica que los datos de la crisis de 2016 ofrecían una visión general de los yacimientos que la empresa explota, pero existen diferencias entre los distintos pozos. «Si bien el promedio puede ser más bajo (del precio cercano a 60 dólares por barril de estos días), siempre hay campos con precio break-even (al que dan utilidades) alto», señala el experto, añadiendo que dichos campos «se vuelven inviables si el barril cae, digamos, por debajo de 60 dólares».

La situación actual plantea interrogantes sobre la evolución de los costos en la industria petrolera. ¿Se han incrementado los valores a los que la extracción es rentable por encima de la inflación, o existen circunstancias especiales que afectan a la empresa en particular?

Implicaciones para el futuro

La decisión de Ecopetrol de evaluar el cierre de campos petroleros refleja la creciente presión que enfrenta la industria debido a la volatilidad de los precios y el aumento de los costos de producción. La compañía se encuentra actualmente analizando sus opciones y adaptándose a un entorno de mercado cada vez más desafiante. La reestructuración de su portafolio de activos y la optimización de sus operaciones son estrategias clave para garantizar su sostenibilidad a largo plazo. La empresa está siendo cautelosa mientras se mantiene a la espera de cómo van a seguir fluctuando los precios.