La Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca (CAR), tras una inspección en un criadero de cerdos en Soacha, impone medidas preventivas por irregularidades en el vertido de residuos que afectan el medio ambiente.
Malas prácticas ambientales
El equipo técnico de la CAR identificó que el criadero, ubicado en la vereda Bosatama, vertía a campo abierto, sin seguir los protocolos establecidos, porcinaza (una mezcla de heces, orina y agua de lavado de animales) líquida y sólida, además de otras sustancias que generan lixiviados. Estas sustancias, sin el debido tratamiento, podrían contaminar las aguas del río Tunjuelo y afectar el suelo de la zona.
Sumado a esto, se hallaron malas prácticas de sanidad, como el manejo negligente de basuras que generó la proliferación de roedores.
Medidas preventivas
Ante estas irregularidades, la CAR impuso medidas preventivas, como la suspensión de los vertimientos de aguas residuales y la implementación de medidas para el manejo de las actividades porcícolas, especialmente relacionadas con los lixiviados, evitando así que sigan afectando los recursos naturales.
Responsabilidad y mitigación
La CAR insta a quienes se dedican a estas actividades a cumplir con la normatividad ambiental y las disposiciones del Ministerio de Agricultura, para el buen manejo de residuos y la mitigación de actividades que puedan generar contaminación.
Declaraciones
"Estamos implementando una medida preventiva por manejo de actividades porcícolas, especialmente relacionadas con lixiviados, con el fin de que no sigan afectando los recursos naturales", indicó César Augusto Rico, director de la Regional Soacha de la CAR.