Cristian Fernando García, conocido como 'Drunk - ebrio' en el mundo del grafiti, fue asesinado a tiros el 18 de julio en el barrio Las Huertas, Ciudad Bolívar, Bogotá.

El crimen, según EL TIEMPO, pudo haber sido un 'ajuste de cuentas' luego de que García presuntamente robara dinero y drogas a miembros de la banda criminal 'Los Costeños'.

El robo y sus consecuencias

El día después del robo, García se internó en un confinamiento de resocialización para superar su adicción al basuco. Semanas después, abandonó el internado, pero el regreso a casa fue complicado debido a las amenazas de 'Los Costeños'.

En los días previos a su muerte, García había regresado a pintar grafitis en las calles, a pesar del peligro. El 18 de julio, pasó frente a la 'olla' de 'Los Costeños', quienes lo reconocieron y se vengaron.

Reacciones y repercusión

El asesinato de García ha generado conmoción y rechazo. El presidente Gustavo Petro lamentó los hechos en su cuenta de Twitter. La familia de García ha guardado reserva sobre el caso.

La Mesa Local de Grafiti/Mural de Ciudad Bolívar ha condenado el crimen y exigido el esclarecimiento del caso. Este es el segundo homicidio de un grafitero en Bogotá desde el asesinato de Diego Felipe Becerra en 2011.

La Secretaría Distrital de Recreación y Deporte ha calificado el suceso como una pérdida irreparable para la comunidad artística y la libertad de expresión.