Las semillas se convierten en un arma contra el cambio climático en La Mojana
Las comunidades indígenas de La Mojana, una región de Colombia afectada por la crisis climática, la pérdida de hábitats y la sobreexplotación de recursos naturales, están utilizando las semillas como una poderosa herramienta para garantizar su seguridad alimentaria.
En colaboración con el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), estas comunidades han identificado las especies vegetales más resistentes al cambio climático y con mayor potencial para la seguridad alimentaria. A través de bancos genéticos y programas de extensión, se están distribuyendo semillas que pueden adaptarse a las sequías e inundaciones prolongadas, ofreciendo a los pequeños agricultores medios de subsistencia sostenibles.
Banco de semillas para la conservación de la agrobiodiversidad
Los bancos genéticos creados por el programa albergan una amplia gama de especies vegetales con características resilientes, distribuidas de acuerdo con las tradiciones culturales de cada región. Esto garantiza que las comunidades tengan acceso a una variedad de cultivos que pueden resistir los desafíos climáticos y garantizar la seguridad alimentaria.
Un esfuerzo conjunto por la conservación
El éxito del programa se atribuye a la colaboración entre la academia, las organizaciones de la sociedad civil, las entidades gubernamentales y las comunidades locales. La Universidad de Córdoba ha brindado asesoría técnica, mientras que las comunidades indígenas han compartido sus conocimientos tradicionales. Esta combinación de distintos saberes ha sido crucial para identificar y conservar las especies vegetales más valiosas.
Alineación con los objetivos globales
El programa está alineado con las metas del Convenio sobre Diversidad Biológica, que promueve la conservación de la agrobiodiversidad, el uso sostenible de las especies silvestres y la restauración de los ecosistemas. Al salvaguardar la agrobiodiversidad en La Mojana, el programa contribuye a los esfuerzos globales para combatir el cambio climático y garantizar la seguridad alimentaria.