En un impactante video que se ha hecho viral, se muestra la cruda realidad del arriendo más barato en Bogotá, donde por solo $100.000 pesos mensuales, los inquilinos enfrentan condiciones de vida extremadamente precarias. Este arriendo se encuentra en la invasión El Pescadero, situada en las zonas periféricas de Bogotá y Soacha, y revela una preocupante situación de vivienda que afecta a muchas personas en la capital.

¿Qué muestra el video?

Los problema de vivienda en Bogotá según el DANE

La situación de la vivienda en Bogotá es alarmante. Según datos del DANE (Departamento Administrativo Nacional de Estadística), la pobreza monetaria en Colombia afecta al 39,3% de la población, y la pobreza extrema al 12,2%. Estas cifras se reflejan en la capital, donde muchas personas no pueden acceder a viviendas dignas. El problema se agrava en las zonas periféricas, como El Pescadero, donde los arriendos más cómodos oscilan entre los $300.000 y $350.000 pesos mensuales, aunque también se encuentran arriendos de $80.000 y $100.000 pesos en condiciones deplorables.

La informalidad laboral y su impacto en la vivienda

La alta tasa de informalidad laboral en Colombia es otro factor que contribuye a la precariedad de la vivienda. Según el DANE, en el primer trimestre de 2024, el 47,8% de la población ocupada en las 23 principales ciudades del país trabaja en el sector informal. Estas personas, que no tienen acceso a un salario mínimo ni a prestaciones sociales, se ven obligadas a aceptar trabajos mal remunerados y a vivir en condiciones desfavorables. La falta de ingresos estables limita sus opciones de vivienda, empujándolos a áreas como El Pescadero.

Medidas necesarias para mejorar la situación

Para abordar la crisis de vivienda en Bogotá, es crucial implementar una serie de medidas integrales:

El video que muestra el arriendo más barato de Bogotá por $100.000 pesos es un duro recordatorio de la precariedad en la que viven muchas personas en la ciudad. Mientras se buscan soluciones a largo plazo, es fundamental que las autoridades y la sociedad en general tomen medidas inmediatas para mejorar las condiciones de vida de estas familias. La dignidad y el derecho a una vivienda adecuada deben ser una prioridad para construir una ciudad más justa y equitativa.