Lavar el coche: más que agua, jabón y trapos

Lavar el coche no es una tarea sencilla que se pueda realizar con tan solo un cubo, jabón y trapos, como se suele creer. Detrás de esta aparentemente sencilla labor se esconde toda una industria especializada con numerosos procesos y procedimientos técnicos que la convierten en una tarea eficiente no solo en términos de limpieza, sino también ecológica. Por ello, te contamos por qué si eres de los que lava el coche en casa, podrías estar dañándolo, afectando al medioambiente y también a tu bolsillo.

Costes y sanciones

Desde la implementación del Código Nacional de Tránsito en 2002, está prohibido lavar cualquier coche en la vía pública, y esta acción se sanciona con una multa de casi 65.000 pesos. Como se explica en el párrafo 9 del artículo 160 del Código Nacional de Tránsito, la multa se debe a la obstaculización de la vía pública y la interrupción del tránsito. Puede ser más costosa, dependiendo de la vía y de si, por su ocurrencia, se produce un accidente.

Además, por cuenta del racionamiento, si te sorprenden malgastando agua en el lavado de un vehículo, las autoridades pueden castigarte con una multa que está entre 700.000 y 1,2 millones de pesos.

El lado científico

Pero la cosa va más allá de las sanciones y tiene su lado científico. Para conocer más detalles, consultamos a Ignacio Ruiz, propietario de Lavafante, una de las empresas más antiguas y exitosas del país en el sector del lavado profesional, quien nos explicó las razones por las que es perjudicial para el coche, el bolsillo y el medioambiente intentar lavar el coche en casa.

Nuestras empresas están reguladas por la Secretaría de Ambiente, que vigila que los vertidos de aguas residuales que salen de lavar un coche no vayan a los desagües de las ciudades y afecten al alcantarillado. En Bogotá, además existe el Decreto Único Reglamentario 1076 de 2015, que impone unos requisitos técnicos entre los cuales está el ‘reciclaje’ del agua de la mano de plantas donde se haga un tratamiento para eliminar sólidos y grasas para utilizar la misma con la que ya se lavaron otros coches. En Lavafante se utilizan 13 litros de agua por minuto. El lavado en promedio toma entre 7 y 8 minutos, dependiendo del tamaño del vehículo y de lo sucio que esté. Eso quiere decir que se gastan entre 90 y 100 litros en promedio por coche. De esos 100 litros, solo hay de 15 a 20 litros de ‘agua nueva’. En cada punto, tenemos una planta de reciclaje que logra que entre el 80 y el 85 por ciento se utilice ‘agua reciclada’ en esa limpieza.

Los coches se lavan en lo que denominamos pistas, donde debajo del punto en el que se lava hay una trampa inicial que recoge el agua que cae. Esta trampa tiene la función de ir sedimentando los sólidos y de ahí en adelante se junta el sistema con una trampa general de todas las pistas y se pasa el agua por nueve puntos de recolección de sólidos.

Estos son recipientes donde se reposa el agua y todo lo que es pesado va para el fondo y queda atrapado mientras el líquido sigue su camino hacia una trampa de grasas que trabaja al revés: se llena por encima, pero el agua se saca por debajo, pues todo lo que es más liviano que el agua, como grasas y detergentes, queda encima.

De allí pasa a un tanque de almacenamiento de agua ya tratada y comienza el proceso de filtrado a través de un filtro de carbón activado, luego de arena sílice antracita, se le inyectan químicos para descontaminarla y por último se pasa a un tanque de almacenamiento de reciclaje y ya se puede reutilizar como ‘agua reciclada’. No se puede reciclar el 100 por ciento del agua porque el barro, el polvo y la arena, entre otros materiales sólidos, le van quitando espacio al agua dentro del sistema de tratamiento. Ahí ocurre un vertimiento al sistema de alcantarillado desde el último tanque que hace que se desperdicie entre el 15 y el 20 por ciento de la que se utilizó en cada lavado. Dos veces al año se cambia el agua. Lo hacemos el día sin coche y en septiembre, cuando ya las trampas están llenas y hay que volver a cambiar toda el agua de cada punto. Entonces se desocupa todo el sistema y se disponen los lodos mediante una empresa certificada en la recolección de este material y se vuelven a llenar las trampas y todo el sistema mediante un carrotanque porque es mucha agua.

Por último, se hace un retrolavado de los filtros diariamente en el que se utiliza ‘agua nueva’, pero también se recolecta, aunque es muy poca en este proceso. Las aguas lluvias se utilizan para lavar también. Cada punto tiene un tanque de agua nueva que está lleno hasta la mitad y que es de 10 metros cúbicos. Cuando llueve cae a los tejados y luego llega a ese tanque. Esa agua sirve, pero tiene que hacerse un filtrado para quitar impurezas grandes y es perfecta para meterla al sistema de agua reciclada. Por ejemplo, cuando llueve en Bogotá, no se utiliza ‘agua nueva’, sino agua lluvia. Nos podrían quitar el agua una semana y no habría problema para poder operar porque el agua de toda la planta es suficiente para funcionar.

Desde que empezó el racionamiento las visitas a nuestros puntos de lavado se han disminuido muchísimo. Estamos operando al 60 por ciento de lo que estábamos antes del racionamiento. Creemos que los clientes están muy preocupados porque se ha dicho que se multa a los coches que estén lavando en la calle, incluso, antes de entrar, preguntan si no los pueden multar si lavan el coche en nuestros puntos. Hay gran confusión en este tema y también se ha generado una conciencia de ahorro que hace parte de este panorama.

Recomendaciones para el lavado del coche en casa

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Consejos para elegir un autolavado

Si no tienes tiempo o ganas de lavar tu coche en casa, puedes llevarlo a un autolavado. Aquí tienes algunos consejos para elegir un autolavado:

Lavar el coche es una tarea importante que ayuda a mantener su aspecto y valor. Siguiendo estos consejos, puedes lavar tu coche de forma segura y eficaz, ya sea en casa o en un autolavado.