Alias Araña: perfil del jefe disidente retenido tras diálogos de paz

Giovanny Andrés Rojas, alias Araña, miembro de la disidencia de las Farc conocida como Coordinadora Nacional Ejército Bolivariano, fue retenido tras el cierre del tercer ciclo de diálogos de paz entre el Gobierno colombiano y ese grupo armado. El operativo judicial generó reacciones encontradas, con la Fiscalía señalando cargos por tráfico de estupefacientes y el comisionado para la paz calificándolo como una "trampa contra el proceso de paz".

¿Quién es alias Araña?

Alias Araña es oriundo de Cali, pero vivió en el departamento de Putumayo desde los 7 años. Fue condenado a 29 años de cárcel por homicidio y concierto para delinquir agravados, fabricación, tráfico y porte de estupefacientes; y fabricación, tráfico, porte o tenencia de armas de fuego. En 2017, el Gobierno lo designó como gestor o promotor de paz y salió de prisión. Sin embargo, posteriormente regresó a la guerra por "intimidaciones".

El operativo y las reacciones

El operativo de retención se realizó en un hotel del occidente de Bogotá, donde se encontraban los disidentes de las Farc con miembros del equipo negociador del Gobierno. Agentes del Cuerpo Técnico de Investigación (CTI) cumplieron con una circular roja de Interpol y procedieron a retener a Rojas.

La Fiscalía explicó en un comunicado que Rojas es requerido por una Corte del Distrito Sur de California, Estados Unidos, "por cargos relacionados con tráfico de estupefacientes". Además, según un informe de las autoridades de Ecuador, es un objetivo de primer nivel por ser uno de los capos del narcotráfico en ese país.

Por su parte, el comisionado para la paz, Otty Patiño, calificó el procedimiento judicial como una "trampa contra el proceso de paz". Alias Araña había sido reconocido como negociador de la Segunda Marquetalia y la Fiscalía había suspendido las órdenes de captura.

El futuro del proceso de paz

El operativo de retención de alias Araña ha generado incertidumbre sobre el futuro del proceso de paz entre el Gobierno colombiano y la Coordinadora Nacional Ejército Bolivariano. Las negociaciones, que buscan abordar transformaciones territoriales, seguridad y participación política, habían avanzado en los últimos meses.

El Gobierno y la disidencia aún no se han pronunciado sobre el impacto de la retención de Rojas en el proceso de paz. Sin embargo, analistas advierten que podría obstaculizar las negociaciones y generar desconfianza entre las partes.