El pastor Iván García, líder espiritual de la iglesia cristiana Nuevo Renacer, fue asesinado en el municipio la Zona Bananera, en el departamento del Magdalena.
Según testigos, el homicida esperaba a García afuera del templo. Minutos después de que el pastor concluyera un servicio religioso, salió caminando acompañado de algunos miembros de su congregación.
Fue en ese momento cuando el sicario lo abordó y disparó varias veces sin contemplaciones, sembrando pánico entre los presentes.
Una de las balas alcanzó a Soldais Mendoza, una fiel que asistía regularmente a la iglesia, quien cayó gravemente herida al suelo. A pesar de los esfuerzos por socorrer al pastor, sus heridas fueron fatales. Mendoza, por su parte, fue trasladada de emergencia al municipio de Ciénaga, donde se encuentra bajo atención médica.
El asesinato de García ha conmocionado a la comunidad de Carital, en el municipio de Zona Bananera.
Fieles y conocidos lo recuerdan como un hombre carismático, bondadoso y un pilar para decenas de familias.
Durante años, García se dedicó a guiar a su congregación con fervor y esperanza, sin que jamás se le conocieran conflictos que pudieran explicar este ataque.
La Confederación Evangélica de Colombia (CEDECOL) condenó enérgicamente el asesinato de Iván García.
En un comunicado público, la entidad destacó que este acto constituye no solo una tragedia para la congregación del pastor, sino también una afrenta contra la libertad religiosa en el país.
Asimismo, CEDECOL llamó a la unión de la comunidad cristiana para clamar por justicia y paz en Colombia, y expresó su solidaridad con la familia del pastor García y los miembros de su iglesia.
El asesinato del pastor Iván García ha encendido nuevamente las alarmas sobre la inseguridad que enfrentan los líderes religiosos en zonas vulnerables de Colombia.
Mientras las investigaciones avanzan, los fieles de la iglesia Nuevo Renacer y otras comunidades cristianas de la región elevan sus oraciones pidiendo consuelo, fortaleza y que la justicia prevalezca.