El asesinato de 'la Diabla' y la captura de los sospechosos
Medellín se encuentra conmocionada tras el esclarecimiento del homicidio de Zaida Andrea Sánchez Polanco, conocida como ‘la Diabla’. Las autoridades están reportando la captura de los presuntos responsables, identificados como los hermanos José Gregorio y Estarlin Oswaldo Morgado Herrera, originarios de Barranquilla. Según informes de la Fiscalía General de la Nación, la identificación y captura de estos individuos fue posible gracias a grabaciones de cámaras de seguridad que los situaron en la escena del crimen.

El crimen en el barrio El Estadio
El violento suceso ocurrió la noche del 22 de enero en el barrio El Estadio de Medellín. Sánchez Polanco fue interceptada al descender de una camioneta de alta gama cerca de su lugar de hospedaje. Testigos presenciales están declarando que un individuo se aproximó en motocicleta y la atacó a tiros antes de que pudiera refugiarse. A pesar de ser trasladada de urgencia a un centro médico, ‘la Diabla’ no logró sobrevivir a las heridas.
¿Por qué asesinaron a ‘la Diabla’?
Las investigaciones están apuntando a dos posibles móviles detrás del asesinato de Zaida Andrea Sánchez Polanco. La primera hipótesis, y quizás la más contundente, está vinculada a la muerte de su esposo, Alexánder Gonzales Pérez, alias ‘el Calvo’, un narcotraficante con fuertes conexiones en la región. Según Jacobo Solano, periodista de Pulzo.com, la decisión de ‘la Diabla’ de ordenar el asesinato de su esposo podría haber tenido graves consecuencias para ella: «Aguachica está cerca al Catatumbo, cerca de Ocaña y hay hay rutas del narcotráfico hacia Barranquilla y Cartagena. Aguachica es un punto estratégico de paso donde se ha instalado el ‘Clan del Golfo’, entonces esos grupos están manejando la droga y la muerte de ‘el Calvo’ fue un golpe muy fuerte para esa organización, porque era una pieza clave en la estructura y eso es lo que le cuesta la vida a ‘la Diabla’ porque mató a su esposo y no se la rebajaron».

El contexto del crimen según Jacobo Solano
Solano está sugiriendo que la muerte de ‘el Calvo’ representó un golpe significativo para la estructura criminal, y que este acto no fue perdonado. La conexión de Aguachica con rutas de narcotráfico y la presencia del ‘Clan del Golfo’ complican aún más el panorama, situando el asesinato en un contexto de ajuste de cuentas y venganza.
La posible implicación de las autoridades
La segunda hipótesis que se está manejando es más delicada, pues apunta a una posible implicación de las autoridades en el crimen. Se está especulando sobre un acuerdo de silencio en la región para encubrir tanto el asesinato de ‘la Diabla’ como una masacre ocurrida en Aguachica. «Hay otra hipótesis de que lo hicieron las autoridades para silenciarla porque habría varios involucrados entre fiscales y policías que tenían conexiones con ‘el Calvo’», afirma Solano. Esta versión sugiere que ‘la Diabla’ podría haber sido silenciada para proteger a individuos dentro del sistema judicial y policial que mantenían vínculos con el narcotráfico.
El pasado de ‘la Diabla’
Zaida Andrea Sánchez Polanco, de 29 años y originaria del Cesar, no era ajena a las investigaciones criminales. Estaba siendo investigada por delitos graves como homicidio y extorsión, y se cree que mantenía vínculos con una red de extorsionistas en Aguachica. Su llegada a Medellín el 14 de enero se produjo tras huir del asesinato de su compañero sentimental y de una masacre que afectó a una familia local días antes. Este historial delictivo está añadiendo complejidad a la investigación y está sugiriendo que su muerte podría ser el resultado de múltiples conflictos y venganzas pendientes.
Las investigaciones continúan
Las autoridades se encuentran profundizando en ambas hipótesis para esclarecer completamente los motivos detrás del asesinato de ‘la Diabla’. La captura de los hermanos Morgado Herrera representa un avance significativo, pero aún quedan muchas preguntas por responder. El caso está poniendo de manifiesto la compleja red de criminalidad y corrupción que opera en la región, y está resaltando la necesidad de una investigación exhaustiva para desentrañar todos los hilos de esta trama.
En conclusión, el asesinato de Zaida Andrea Sánchez Polanco, alias ‘la Diabla’, sigue siendo un caso que está generando controversia y debate en Medellín. Con la captura de los presuntos responsables, las autoridades están buscando reconstruir los hechos y llevar a los culpables ante la justicia. Sin embargo, las dos hipótesis que se están manejando, la venganza por la muerte de su esposo y la posible implicación de las autoridades, están revelando un entramado de poder y corrupción que trasciende el simple ajuste de cuentas entre criminales.
Este artículo se basa en información obtenida de Pulzo.com y declaraciones del periodista Jacobo Solano.