Sonsón y Abejorral entre los municipios del Oriente antioqueño con más muertes violentas en lo corrido del año
En medio de las disputas por las rentas criminales, en la subregión se han vuelto recurrentes los reportes de las autoridades sobre el hallazgo y destrucción de laboratorios para el procesamiento de hoja de coca. En zona rural de Sonsón, tropas del Ejército Nacional encontraron una estructura que pertenecería a la subestructura Alberto Padilla, de las AGC.
Disputas por las rentas criminales
Los municipios del Oriente antioqueño siguen siendo escenario de enfrentamientos entre grupos armados ilegales que buscan controlar las rentas criminales, especialmente la comercialización de drogas.
Según la Secretaría de Seguridad de Antioquia, entre el 1 de enero y el 22 de abril de este año, las muertes violentas aumentaron en siete municipios de la subregión, entre ellos Sonsón y Abejorral.
En Sonsón, el número de homicidios pasó de 2 en el mismo periodo de 2023 a 7 en lo corrido del año. En Abejorral, la cifra aumentó de 4 a 7.
Municipios afectados
Además de Sonsón y Abejorral, otros municipios del Oriente antioqueño que han registrado un aumento en las muertes violentas son:
- Marinilla: de 4 a 6 casos
- El Peñol: de 3 a 5 casos
- El Retiro: de 0 a 3 casos
- Guatapé: de 0 a 2 casos
- San Rafael: de 0 a 1 caso
Grupos armados ilegales
Las autoridades han identificado 11 estructuras criminales que operan en el Oriente antioqueño, entre ellas el 'clan del Golfo', 'el Mesa', 'los Pachelly', 'la Terraza' y 'el clan Oriente'.
Estos grupos se disputan el control de las rutas de narcotráfico y otras rentas criminales, lo que ha generado un aumento de la violencia en la subregión.
Acciones de las autoridades
La Policía Antioquia y el Ejército Nacional han intensificado sus operativos en el Oriente antioqueño para combatir a los grupos armados ilegales y reducir la violencia.
En los últimos meses, las autoridades han capturado a 1.286 personas y destruido 42 laboratorios para el procesamiento de hoja de coca.
Sin embargo, la situación de seguridad en el Oriente antioqueño sigue siendo preocupante, y las autoridades trabajan para fortalecer sus estrategias de combate al crimen organizado.