Vendaval azota al Atlántico, dejando daños en varias poblaciones
El departamento del Atlántico vive una jornada de caos y destrucción debido al vendaval que azotó, la tarde de este lunes, a varias poblaciones, dejando tras de sí una estela de daños materiales significativos.
En Suan, sur del departamento, la alcaldesa Carolay Calvo informó que el aguacero y los fuertes vientos que se presentaron el día anterior provocaron graves afectaciones en más de 100 viviendas y en cuatro colegios del municipio.
Además, los cultivos de yuca y maíz resultaron inundados, al igual que el cementerio local, lo que ha generado preocupación en la comunidad. La mandataria también destacó que las fuertes lluvias causaron fallas en el servicio de acueducto, agravando aún más la situación de emergencia que se vive en la región.
Daños en la infraestructura eléctrica
Las fuertes brisas también derribaron árboles, lo que ocasionó la ruptura de postes y la caída de líneas eléctricas en Piojó, Ponedera, Usiacurí y Sabanalarga, así como en la banda oriental en Sabanagrande, Santo Tomás y Palmar de Varela, afectando incluso la vía que conecta Sabanagrande con Malambo, Galapa, Guaimaral y Paluato.
Ante la magnitud de los daños, la empresa Air-e desplegó un plan de emergencia con equipos pesados para retirar los postes y redes eléctricas caídas.
Según el ingeniero Ramiro Castilla Andrade, gerente de Air-e en el Atlántico, se está trabajando de manera coordinada con las autoridades locales para restablecer el servicio eléctrico en el menor tiempo posible.
Además, se registraron daños en Siape, San Salvador, la vereda Tamarindo y el barrio La Central en Soledad. Los técnicos de Air-e continúan trabajando en la normalización del servicio eléctrico, especialmente en el circuito Caracolí 5, donde se presentaron afectaciones en cables de potencia que han dejado sin energía a sectores de Galapa y su zona rural.