La Defensoría advirtió con anterioridad sobre el conflicto en el Catatumbo, pero el Gobierno ignoró las alertas

En medio del agravamiento del conflicto en la región del Catatumbo, se ha revelado que la Defensoría del Pueblo alertó al Gobierno sobre la problemática en noviembre de 2024, pero sus advertencias fueron desatendidas.

El informe de la Defensoría

El informe de la Defensoría, emitido en noviembre de 2024, detallaba la grave situación de orden público en el Catatumbo, causada por las confrontaciones entre el ELN y las disidencias de las FARC.

“Las tensiones entre el Frente 33 de disidencias de las FARC y el ELN se han vuelto a exacerbar y ha resurgido la probabilidad de una confrontación entre ellos”, advirtió la Defensoría.

El informe identificó varios escenarios de riesgo y solicitó al Gobierno y a la Fuerza Pública una intervención urgente para evitar una confrontación, lo que finalmente ocurrió.

La inacción del Gobierno

A pesar de las advertencias de la Defensoría, el Gobierno no tomó medidas preventivas, lo que ha llevado a una escalada de violencia en la región.

“La alerta de riesgo inminente no fue atendida y no se tomaron las medidas preventivas necesarias”, lamentó la Defensoría.

Las consecuencias

La falta de atención a las advertencias de la Defensoría ha tenido consecuencias devastadoras para la región del Catatumbo.

  • Más de 80 asesinatos
  • Miles de desplazados
  • Personas confinadas y desaparecidas

Responsabilidades

El Gobierno es el principal responsable de la actual crisis en el Catatumbo por no haber tomado en serio las advertencias de la Defensoría y por no actuar para prevenir el conflicto.

La sociedad civil y los organismos internacionales deben exigir al Gobierno que rinda cuentas por su inacción y que tome medidas inmediatas para restablecer la paz y la seguridad en la región.