Se intensifica el clamor de los indígenas antioqueños por ser escuchados en medio del conflicto
Los pueblos indígenas del departamento de Antioquia, con una población de 37.629 comuneros, denuncian estar siendo víctimas del recrudecimiento de la violencia, a pesar de los diálogos de paz entre el Gobierno y varios grupos armados.
Grupos ilegales controlan el territorio
Los grupos armados ilegales, como el Ejército de Liberación Nacional (ELN) y las Autodefensas Gaitanistas de Colombia (AGC), han impuesto restricciones a la movilidad y al acceso a alimentos en varias zonas del departamento.
Héctor Torres Domicó, dirigente del pueblo Embera Eyábida, relata que los comuneros no pueden cazar, pescar ni desplazarse libremente, lo que está afectando gravemente su seguridad alimentaria y sus medios de subsistencia.
El confinamiento, una estrategia de supervivencia
Ante la imposibilidad de desplazarse masivamente a las cabeceras municipales, muchas comunidades indígenas optan por el confinamiento, una medida que les permite evitar las confrontaciones armadas, pero que a la vez les limita el acceso a servicios esenciales.
La Oficina de Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA) ha identificado que las subregiones más afectadas por el conflicto son el Suroeste, Occidente, Bajo Cauca y Nordeste de Antioquia.
Los más vulnerables: los resguardos indígenas
Según la Gobernación de Antioquia, entre 2019 y 2023, las comunidades indígenas fueron víctimas de confinamiento en siete de los 125 municipios del departamento, afectando a un total de 7.872 personas.
La Secretaría de Seguridad y Justicia de Antioquia señala que los resguardos indígenas son los más vulnerables en situaciones de confrontación armada, pues representan el 95% de las víctimas de confinamiento.
Medidas urgentes para proteger a los indígenas
Los pueblos indígenas de Antioquia exigen al Gobierno y a los grupos armados que tomen medidas urgentes para garantizar su seguridad y sus derechos territoriales.
Las autoridades departamentales y municipales están implementando acciones para brindar asistencia humanitaria a las comunidades afectadas, pero se necesita una intervención más integral para abordar las causas profundas del conflicto y proteger eficazmente a los pueblos indígenas.