El Papa Francisco nombra a dos nuevos obispos para Colombia
El Papa Francisco ha designado a dos nuevos obispos para Colombia. Uno de ellos es el padre Wiston Mosquera Moreno, vicario general de la Arquidiócesis de Cali desde 2017 y párroco de la Catedral, en el centro de la capital del Valle del Cauca. El sacerdote ha sido nombrado obispo de la Diócesis de Quibdó, capital del Chocó.
Biografía de Wiston Mosquera Moreno
El reverendo padre Mosquera Moreno nació en Andagoya, perteneciente a la Diócesis de Istmina – Tadó, el 17 de marzo de 1967. Realizó sus estudios de Filosofía y Teología en el Seminario Mayor San Pedro Apóstol de Cali y fue ordenado sacerdote para la Arquidiócesis de Cali el 19 de marzo de 2005.
Mosquera Moreno es bachiller en Teología por la Pontificia Universidad Bolivariana y licenciado en Filosofía y Ciencias Religiosas por la Universidad Lumen Gentium. A lo largo de su trayectoria pastoral, ha desempeñado los siguientes cargos:
- Vicario Parroquial de Nuestra Señora del Rosario Jamundí Valle (2005)
- Párroco de Nuestra Señora del Perpetuo Socorro en Robles Valle (2006-2011)
- Párroco del Señor de los Milagros en Cali (2011-2012)
- Rector del Santuario de la Divina Misericordia en Cali (2012-2017)
- Vicario Episcopal para la zona oriental (2012-2017)
- Vicario General (2017- hasta la fecha)
- Párroco de la Catedral San Pedro Apóstol de Cali (2018 - hasta la fecha)
El nombramiento de Wiston Mosquera Moreno como obispo de Quibdó es un reconocimiento a su trayectoria pastoral y a su compromiso con la Iglesia en Colombia.
Reacciones al nombramiento
La designación de Wiston Mosquera Moreno como obispo de Quibdó ha sido recibida con alegría por la comunidad católica de Colombia. El arzobispo de Cali, monseñor Darío de Jesús Monsalve, ha destacado la labor pastoral del padre Mosquera y su profundo amor por la Iglesia.
Por su parte, el padre Mosquera ha expresado su gratitud al Papa Francisco por su confianza y ha manifestado su disposición a servir a la Diócesis de Quibdó con dedicación y entrega.
El nombramiento de dos nuevos obispos para Colombia es una muestra de la vitalidad de la Iglesia en el país y de su compromiso con la evangelización.