El ELN anuncia un preocupante paro armado de 72 horas en Chocó

El Ejército de Liberación Nacional (ELN) ha anunciado un paro armado de 72 horas en la región del San Juan, al sur del departamento del Chocó, a partir del 18 de febrero y hasta las 00:00 horas del 21 de febrero. La guerrilla justifica esta acción por el aumento de la presencia del Clan del Golfo y la supuesta connivencia con el Ejército.

En un comunicado emitido por el Frente de Guerra Occidental Ogli Padilla del ELN, la organización responsabiliza al Gobierno Nacional de la grave crisis humanitaria que azota la región y del crecimiento del Clan del Golfo. Además, denuncia la connivencia entre la fuerza pública y el grupo armado.

"El Gobierno Nacional es el primer responsable de la grave crisis humanitaria de esta región del país, así como del crecimiento y posicionamiento del Cartel del Golfo (sic) en el departamento", señala el comunicado.

El ELN también se refiere al envío de 340 militares a la subregión del San Juan y la llegada de un barco de la Armada, calificándolo de publicidad engañosa sin aportar pruebas.

Antecedentes y consecuencias

Desde el pasado 5 de febrero, el ELN y el Clan del Golfo han protagonizado enfrentamientos en el Chocó, dejando hasta el momento 3.600 personas desplazadas y más de 12.000 confinadas. En 2024, Chocó fue el departamento con más casos de confinamiento en Colombia, según el Comité Internacional de la Cruz Roja.

El choque entre ambas estructuras se debe principalmente al control de la salida de cocaína hacia el Pacífico, la minería ilegal y el contrabando de madera. La situación se ha agravado por la presencia de minas antipersonal, denunciada por las autoridades.

La gobernadora del Chocó, Nuria Carolina Córdoba, ha denunciado ante la Organización de Estados Americanos (OEA) la grave crisis humanitaria en el departamento y ha afirmado que el 80% del territorio está minado.

Medidas y reacciones

Ante esta situación, el Ejército Nacional ha desplegado 340 hombres en la zona y otros 150 están en alistamiento. Los municipios afectados por los combates son Itsmina, Medio San Juan, Nóvita, Sipí y Litoral de San Juan.

Organizaciones humanitarias han expresado su preocupación por las consecuencias del paro armado para la población civil. El padre Albeiro Parra, director de la Coordinación Regional del Pacífico de la Diócesis de Quibdó, ha alertado sobre la incapacidad de las autoridades para atender la magnitud de la crisis humanitaria.

"Colombia en estos momentos es una máquina de producir víctimas. La Unidad de Víctimas no va a tener la capacidad para atender la magnitud de esta crisis humanitaria que se viene encima", ha declarado el padre Parra.