Enfermedades tras las rejas en estaciones de Policía de Cali
La situación de hacinamiento en las estaciones de Policía de Cali está generando preocupación por la propagación de enfermedades entre los detenidos. Según un informe de la Personería Municipal, en la estación de La Flora, por ejemplo, se han identificado casos de tuberculosis, lo que ha llevado a las autoridades a trasladar a los afectados a centros de salud para recibir tratamiento.
Hacinamiento, un caldo de cultivo para las enfermedades
El hacinamiento en las estaciones de Policía de Cali es un problema de larga data que se ha agravado en los últimos años. Según la Personería Municipal, en algunas estaciones la ocupación supera el 300%, lo que crea condiciones insalubres y favorece la propagación de enfermedades.
La falta de espacio, la ventilación inadecuada y la falta de acceso a servicios de higiene básicos son factores que contribuyen a la propagación de enfermedades en las estaciones de Policía. Además, los detenidos suelen estar en contacto cercano durante largos períodos de tiempo, lo que aumenta el riesgo de transmisión de infecciones.
Tuberculosis, una enfermedad preocupante
La tuberculosis es una enfermedad bacteriana que afecta principalmente a los pulmones. Es altamente contagiosa y se transmite a través de las gotitas que se expulsan al toser o estornudar. En las condiciones de hacinamiento que se viven en las estaciones de Policía de Cali, el riesgo de contagio es muy alto.
Los síntomas de la tuberculosis incluyen tos persistente, fiebre, sudores nocturnos y pérdida de peso. Si no se trata, la tuberculosis puede ser mortal.
Medidas para enfrentar el problema
Las autoridades de Cali están tomando medidas para enfrentar el problema del hacinamiento y la propagación de enfermedades en las estaciones de Policía. En colaboración con el Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario (Inpec), se está trabajando en el traslado de los detenidos a centros de reclusión más adecuados.
Además, se están implementando medidas para mejorar las condiciones de higiene en las estaciones de Policía, como la instalación de sistemas de ventilación y el aumento de la frecuencia de limpieza.
Sin embargo, estas medidas son insuficientes para resolver el problema de fondo, que es el hacinamiento en las estaciones de Policía. Es necesario invertir en la construcción de nuevos centros de reclusión y en la reforma de los existentes para garantizar condiciones dignas para los detenidos.