Mencionan a funcionario de Petro en caso de ‘Papá Pitufo’
El escándalo que rodea a Diego Marín, alias ‘Papá Pitufo’ o el ‘Zar del contrabando’, sigue generando revuelo en Colombia. Se acusa a este individuo de intentar infiltrarse en la campaña del presidente Gustavo Petro e incluso de haber aportado 500 millones de pesos a la misma, que posteriormente fueron devueltos.

Director de la UNP mencionado en posible plan para asesinar a agente encubierto
En el transcurso de la investigación realizada por la Fiscalía General de la Nación, se descubrió un presunto plan para acabar con la vida de Álvaro Galvis, un agente encubierto en el caso y subintendente de la Policía Fiscal y Aduanera.

Según el diario El Tiempo, el nombre de Galvis fue mencionado en 2023. Sin embargo, ‘Papá Pitufo’ tuvo conocimiento de su existencia y empezó a dilatar la infiltración en el caso.
Galvis acudió a la residencia del ministro de Defensa, Iván Velásquez, para entregarle información sobre el caso y facilitar el desmantelamiento del grupo de contrabando. Sin embargo, fue seguido por Freddy Camilo Gómez Castro, abogado y mano derecha de Diego Marín, quien supuestamente ocupó un cargo en la alcaldía de Bogotá durante la administración de Petro.
En un video filtrado a la prensa, Gómez Castro advirtió a Galvis sobre los rumores de que estaba proporcionando información a Velásquez y que un grupo de contrabandistas amenazaba con asesinarlo por supuestamente cobrarles sobornos.

Gómez Castro también mencionó que algunos agentes de investigación estaban investigando a Galvis y lo tenían bajo vigilancia. En este contexto, aludió a Augusto Rodríguez, director de la Unidad Nacional de Protección (UNP), quien supuestamente se comunicó con el ministro Velásquez para expresar sus dudas sobre la confiabilidad del agente encubierto.
Preocupaciones sobre la integridad del agente encubierto
Las dudas planteadas por el director de la UNP sugieren que existen preocupaciones sobre la integridad de Galvis como agente encubierto. Estas preocupaciones podrían poner en peligro el caso y la seguridad del propio Galvis.
La investigación en curso arrojará más luz sobre la naturaleza de estas preocupaciones y su impacto en el caso.