La `paloterapia` no es la respuesta: expertos advierten sobre las consecuencias legales y penales
En medio de la creciente inseguridad y la desconfianza en las autoridades, algunas personas recurren a la violencia como respuesta a los robos o intentos de robo. Sin embargo, expertos legales advierten que este tipo de acciones, conocidas como `paloterapia`, no solo son ilegales sino que pueden tener graves consecuencias penales.
¿Qué es la `paloterapia`?
La `paloterapia` es un término coloquial que se utiliza para describir la justicia por mano propia, en la que los ciudadanos toman medidas violentas contra presuntos delincuentes sin la intervención de las autoridades.
¿Por qué la `paloterapia` es ilegal?
El sistema jurídico colombiano no reconoce la justicia por mano propia como una defensa legal válida. De hecho, tales actos son considerados delitos, ya que el Estado es el único que tiene la potestad de usar la fuerza y administrar justicia.
Según Alejandro Benavides, secretario general de la Universidad Manuela Beltrán y especialista en Derecho, Ciencia Política y Criminología, "la justicia por mano propia ocurre cuando la comunidad toma medidas contra presuntos delincuentes sin la participación de las autoridades".
Consecuencias penales
Las consecuencias penales de la `paloterapia` pueden ser graves, incluso si el presunto ladrón sobrevive. Si el presunto ladrón muere, el responsable podría enfrentar cargos de homicidio o tentativa de homicidio, con penas de hasta 25 años de cárcel.
"Es importante recordar que el sistema legal brinda mecanismos para denunciar y perseguir los delitos. La violencia nunca debe ser la solución, ya que puede empeorar la situación y poner en riesgo la vida de las personas inocentes", enfatizó Benavides.
Alternativas a la `paloterapia`
Existen alternativas legales y efectivas para abordar la inseguridad, como:
- Denunciar los delitos a las autoridades.
- Colaborar con las fuerzas de seguridad proporcionando información.
- Participar en programas de vigilancia comunitaria.
Es crucial que los ciudadanos trabajen en conjunto con las autoridades para garantizar la seguridad y el orden público, respetando siempre el Estado de derecho.