Familias de "Las Colinas Campestres" respiran tranquilas tras fallo que ordena demolición de 27 torres

Un fallo histórico del Tribunal Administrativo del Atlántico pone fin a 18 años de espera y zozobra para las 400 familias afectadas por los daños estructurales en el Complejo Residencial "Las Colinas Campestres 1 y 2" de Barranquilla. El dictamen ordena la demolición por implosión de las torres y la construcción de 27 nuevas con las mismas o mejores características.

Un largo camino a la justicia

El proceso legal inició en 2006, luego de que se presentaran los primeros daños en los inmuebles, supuestamente debido a la inestabilidad del terreno y deslizamientos. En 2019, un fallo de primera instancia favoreció al Distrito, pero los afectados apelaron y lograron la revocación de la sentencia.

El sueño de la casa propia se hace realidad

El abogado Fernando Borda, quien representa a los demandantes, explica que este fallo es un hito en la historia de Barranquilla y marca un precedente en la protección de los derechos colectivos de los ciudadanos. Las familias afectadas, que habían sido reubicadas temporalmente y recibían subsidios de arrendamiento, ahora ven renovada su esperanza de tener una vivienda digna.

Detalles del fallo

Reacciones al fallo

Los afectados han recibido con alegría y alivio la noticia. Ninfa Barros, una de las damnificadas, expresa que este fallo es un triunfo de la perseverancia y la esperanza. "Es un fallo histórico que pone fin a una situación compleja que vivimos durante más de una década. No tenemos duda de que se cumplirá", afirma.

Antecedentes

"Las Colinas Campestres" fue un proyecto de vivienda de interés social construido a finales de los años 90 por la Alcaldía de Barranquilla a través de Fonvisocial. Sin embargo, desde su construcción se han presentado múltiples denuncias sobre fallas estructurales y problemas de inestabilidad en el terreno.

Implicaciones del fallo

Este fallo sienta un precedente importante en la protección de los derechos de los consumidores y la obligación de las autoridades de garantizar viviendas seguras y dignas para los ciudadanos. También pone de manifiesto la necesidad de realizar estudios técnicos rigurosos antes de construir en terrenos potencialmente inestables.