El Código Electoral se hunde de nuevo: Colombia queda bajo un decreto de 1986
La Corte Constitucional de Colombia ha vuelto a hundir el proyecto de reforma del Código Electoral, dejando al país bajo la tutela de un decreto de 1986 que regula estos aspectos. Alejandra Barrios, directora de la Misión de Observación Electoral (MOE), ha explicado las implicaciones y la hoja de ruta a seguir tras la decisión del alto tribunal.
Falta de debate y análisis
Barrios ha destacado que el hundimiento del proyecto se advirtió debido a la falta de debate y análisis en los debates finales en la Cámara de Representantes, que duraron muy pocas horas. Ha criticado la ausencia de un verdadero debate, señalando que se había advertido, señalado e indicado.
Avances perdidos y puntos negativos
La versión del segundo código electoral que se discutió ya incorporaba mejoras respecto al primero, que se hundió por ser un "código desastre". Sin embargo, se han perdido avances como el fortalecimiento de los tribunales de garantías, los procedimientos para auditorías y la regulación de la revocatoria e inscripción de candidaturas. Además, el código seguía concentrando demasiado poder en la Registraduría Nacional del Estado Civil.
Temas de forma y ausencia de análisis fiscal
También se han advertido problemas de forma en el código electoral, como la ausencia de análisis del impacto fiscal. Se pedía conocer el coste de las propuestas, que incluían nuevos cargos de libre nombramiento y remoción y nuevos cargos de alto nivel. También se planteaba la posibilidad de avanzar hacia el voto electrónico, pero sin ningún tipo de estudio sobre su coste, funcionamiento o implicaciones.
Un nuevo código más acotado
Barrios considera que el nuevo código electoral debería ser menos ambicioso y centrarse en la revisión de procedimientos y ajustes. Debería incluir procedimientos para mejorar la calidad del censo electoral, como combatir la transhumancia electoral y controlar la conformación del censo. También es fundamental mejorar las auditorías, como demuestra el error de 500.000 votos en la elección del Congreso.
Otros aspectos que deberían incluirse en el nuevo código son los procedimientos de conformación del censo electoral, registro de candidatos, inscripción de testigos electorales y anulación de inscripciones de candidaturas. Además, se deben establecer procedimientos de seguridad informática para salvaguardar la información y la transmisión de la información.
Diálogo y tranquilidad
Barrios ha propuesto iniciar un diálogo tranquilo para preparar los procedimientos que garanticen la transparencia y la equidad en los procesos electorales. No es urgente un nuevo código electoral, pero hay temas que deben resolverse y que sería mejor abordar explícitamente en una ley.