Presidente Petro pide protección para periodistas tras amenazas a medio Vorágine

El presidente de Colombia, Gustavo Petro, ha pedido este jueves "activar de inmediato las rutas de seguridad" para el medio colombiano Vorágine, que denunció amenazas por sus investigaciones relacionadas con paramilitarismo y narcotráfico, y otros seis periodistas identificados como de "alto riesgo".

Contexto de las amenazas

Vorágine, un portal de periodismo independiente fundado en 2020, anunció el jueves 10 de octubre que suspendería indefinidamente las investigaciones relacionadas con el paramilitarismo y el narcotráfico debido a las amenazas recibidas. El medio ha publicado investigaciones sobre derechos humanos, conflicto armado, narcotráfico y medio ambiente.

Tras el anuncio de Vorágine, el presidente Petro se pronunció a través de su cuenta de Twitter, condenando las amenazas y ordenando la activación de las rutas de seguridad para el medio y los periodistas identificados como de alto riesgo.

Reacciones y críticas

Las amenazas contra Vorágine y los periodistas han generado preocupación y críticas entre organizaciones de libertad de prensa y periodistas. La Fundación para la Libertad de Prensa (FLIP) ha manifestado su preocupación por la persistente intención del mandatario de "debilitar el debate sobre asuntos de interés público relacionados con la gestión del Gobierno".

Compromiso del gobierno con la libertad de prensa

El presidente Petro ha enfrentado críticas en el pasado por sus enfrentamientos con la prensa, pero su reciente pedido de protección para Vorágine y los periodistas sugiere un cambio de postura. El gobierno ha asegurado su compromiso con la libertad de prensa y la protección de los periodistas que realizan investigaciones sobre temas sensibles.

Llamado a la solidaridad y protección

Las amenazas contra Vorágine y los periodistas son un recordatorio de la importancia de la libertad de prensa en una democracia. Es esencial que los medios de comunicación puedan investigar e informar libremente sin temor a represalias. La sociedad civil, los organismos internacionales y el gobierno deben unirse para garantizar la protección de los periodistas y defender la libertad de expresión.