A dos años de haber llegado a la Casa de Nariño, el presidente Gustavo Petro sigue en deuda con el Caribe colombiano y en especial con Barranquilla y el Atlántico, territorios donde logró una buena votación para ganar las elecciones presidenciales. (Ingrese al especial: Dos años de Petro: así ha sido su gobierno) Petro sacó 673 mil votos en el departamento, barriendo en 17 de los 22 municipios, y en Barranquilla sacó 358 mil votos, suficientes para derrotar a Rodolfo Hernández, la carta de sus contendores.

Ausencia de obras y promesas incumplidas

A pesar de la alta votación obtenida, el Gobierno del Cambio de Petro ha estado marcado por la ausencia de obras y el incumplimiento de promesas en el Atlántico. Los proyectos de infraestructura, subsidios de vivienda y mejoras en servicios públicos que se esperaban con la llegada del nuevo gobierno, no se han materializado.

Los gremios y la dirigencia política de la región han manifestado su malestar por la falta de atención del gobierno central a esta zona del país. El senador barranquillero Mauricio Gómez Amín (Liberal) ha criticado duramente la gestión de Petro, señalando que parece no interesarle el Caribe y lo ha desafiado a que diga qué obras ha inaugurado en Barranquilla, el Atlántico o el Caribe.

Pérdida de la sede de los Juegos Panamericanos

Uno de los golpes más duros para Barranquilla fue la pérdida de la sede de los Juegos Panamericanos 2027. La ciudad se había preparado con entusiasmo para albergar este importante evento deportivo, pero la falta de apoyo del gobierno nacional llevó a que la organización retirara la sede a Barranquilla.

A pesar de los esfuerzos del alcalde Alejandro Char y el gobernador del Atlántico, Elsa Noguera, para conseguir los recursos necesarios, el gobierno de Petro no respondió a las solicitudes. Esto generó un gran desánimo entre los barranquilleros, que vieron frustradas sus esperanzas de ser anfitriones de los Juegos Panamericanos.

Tarifas de energía eléctrica sin solución

Otro tema que preocupa a los habitantes de Barranquilla y el Atlántico son las altas tarifas de energía eléctrica. Petro se comprometió durante su campaña a solucionar este problema, pero hasta el momento no ha habido avances significativos.

El coordinador de la Liga Nacional de Usuarios en la Costa Caribe, Norman Alarcón Rodas, ha cuestionado la falta de voluntad política del presidente Petro para atender este problema. Según Alarcón, las tarifas eléctricas en el Caribe siguen siendo excesivamente altas, a pesar de que ya estamos a mitad del periodo presidencial de Petro.

Peaje de Papiros y valorización de la Vía al Mar

El polémico peaje de Papiros, en la vía al mar, es otro tema que genera malestar en Barranquilla y el Atlántico. Este peaje, que lleva más de 20 años en funcionamiento, ha sido una fuente de constantes protestas por parte de la ciudadanía.

Con la llegada de Petro a la presidencia, se esperaba que el peaje fuera eliminado, pero la ministra de Transporte, María Constanza García, ha anunciado que la caseta seguirá funcionando. Además, el gobierno anunció un proyecto de valorización para financiar la terminación de la doble calzada Barranquilla-Cartagena, lo que ha generado críticas por parte de diferentes actores de la región.

Repercusiones de la gestión de Petro en Barranquilla y el Atlántico

La gestión del gobierno de Petro en Barranquilla y el Atlántico ha tenido un impacto negativo en la región. La falta de obras, el incumplimiento de promesas y la ausencia de soluciones a problemas como las altas tarifas de energía eléctrica y el peaje de Papiros, han generado malestar entre la ciudadanía.

Los gremios, la dirigencia política y los habitantes de la región esperan que el gobierno nacional atienda sus demandas y cumpla con los compromisos adquiridos durante la campaña presidencial. De lo contrario, el descontento y el desencanto con el gobierno de Petro seguirán creciendo en Barranquilla y el Atlántico.