Puente sobre el río Cauca en estado crítico: Conexión clave al aeropuerto en riesgo

La situación en el Valle del Cauca se está volviendo cada vez más preocupante. Uno de los puentes más importantes del departamento, que conecta ciudades clave como Santiago de Cali, Palmira y Yumbo, se encuentra en un estado crítico que exige atención inmediata. Este puente, ubicado en el sector de Cencar y vital para el acceso al aeropuerto Alfonso Bonilla Aragón, está al borde del colapso, generando alarma entre los ciudadanos y las autoridades.

¿Qué está pasando con el puente de Cencar?

Según reportes ciudadanos y análisis técnicos, el puente presenta graves deterioros. Los aislantes están visiblemente dañados, produciendo ruidos preocupantes cada vez que un vehículo lo atraviesa. Además, una de las columnas de soporte muestra afectaciones significativas, posiblemente debido al hundimiento del terreno. Esto compromete seriamente la estabilidad de toda la estructura. La gravedad de la situación radica en que este puente cruza el río Cauca, y un colapso podría tener consecuencias trágicas.

La gobernadora Dilian Francisca Toro ha expresado su preocupación por el estado del puente, señalando que las fuertes lluvias y el aumento del caudal del río Cauca han exacerbado la situación. «El puente está en muy mal estado. Es necesario demolerlo y construir uno nuevo», afirmó la mandataria, descartando soluciones parciales o reparaciones menores.

La respuesta de las autoridades y las concesionarias

Ante la inminente amenaza, se ha habilitado un desvío de 1,2 kilómetros para el tráfico pesado, intentando reducir los riesgos para los usuarios mientras se buscan soluciones definitivas. Sin embargo, la responsabilidad sobre la reparación o reconstrucción del puente ha generado controversia.

Según la información disponible, Rutas del Valle, la concesionaria encargada de la ruta que incluye el puente, recauda peajes pero se ha negado a intervenir en su reparación durante el último año. Como señala la cuenta de Twitter @elefantescol, «Menos mal que las concesiones son para arreglar las vías.»

Por su parte, la Gobernación del Valle ha solicitado la intervención de la Agencia Nacional de Infraestructura (ANI) para la construcción de un nuevo puente. No obstante, la gobernadora Toro advierte que el costo de esta nueva infraestructura no está contemplado en el contrato de concesión actual.

Implicaciones y próximos pasos

La situación del puente de Cencar no solo afecta la movilidad en la región, sino que también plantea serias preguntas sobre la gestión y el mantenimiento de las infraestructuras viales en Colombia. ¿Quién debe asumir la responsabilidad de garantizar la seguridad de los ciudadanos y la integridad de estas estructuras?

Las palabras de la Gobernadora:

  • Monitoreo constante: La Gobernación ha estado monitoreando el puente desde 2023, evidenciando un deterioro estructural severo.
  • Demolición y reconstrucción: La solución definitiva, según la gobernadora, es la demolición del puente actual y la construcción de uno nuevo.
  • Llamado a la ANI: Se ha realizado un llamado urgente a la Agencia Nacional de Infraestructura (ANI) para que asigne los recursos necesarios para la construcción del nuevo puente.

¿Qué esperar en el futuro inmediato?

La ANI deberá evaluar la situación y determinar si asume la financiación del nuevo puente. Mientras tanto, el desvío para el tráfico pesado seguirá en funcionamiento, generando retrasos y costos adicionales para los transportistas y usuarios de la vía. La comunidad espera una pronta solución que garantice la seguridad y la conectividad de la región.

La situación del puente sobre el río Cauca en Cencar es un claro ejemplo de la importancia de la inversión y el mantenimiento adecuado de las infraestructuras viales. Las autoridades y las concesionarias deben trabajar en conjunto para encontrar una solución que garantice la seguridad y la movilidad de los ciudadanos del Valle del Cauca.

Se está a la espera de una respuesta de la ANI frente al llamado de la gobernadora, mientras tanto, la comunidad sigue utilizando el desvío habilitado, soportando las incomodidades que esto genera. El tiempo apremia, y la necesidad de una solución definitiva se hace cada vez más evidente.