Preocupante ola de violencia azota a Santa Marta

La capital del Magdalena atraviesa una racha de homicidios alarmante, con seis personas asesinadas en la jornada de ayer, incrementando la cifra de muertes violentas a 84 en lo que va del año, la más alta de la última década.

Asesinatos en la zona urbana y rural

En el área urbana de Santa Marta, dos personas fueron víctimas de sicariato, mientras que en la zona rural se hallaron los cuerpos de cuatro hombres torturados y descuartizados.

Reacciones ante la situación

La crisis de seguridad ha generado temor entre los habitantes y confrontaciones políticas entre el máximo líder de la oposición, Carlos Caicedo, y el alcalde Carlos Pinedo Cuello, quienes se culpan mutuamente por la situación crítica.

Falta de estrategias y coordinación

El experto en seguridad, Lerber Dimas, señala que la falta de estrategias de seguridad y coordinación entre los gobernantes y líderes políticos ha facilitado el accionar de los violentos, además de aprovechar la poca respuesta institucional para delinquir sin mayores contratiempos.

Santa Marta, ciudad desprotegida

Dimas afirma que Santa Marta nunca se preparó para contener la violencia y reducir los flagelos que venía sufriendo. Esta falta de previsión ha llevado a que la ciudad sea atractiva para la delincuencia organizada, que llega de otras regiones para cometer delitos.

Impacto en la sociedad

La crisis de seguridad tiene un profundo impacto en toda la sociedad. La ciudad ha sido incluida en el ranking de las 50 ciudades más violentas del mundo, lo que evidencia la gravedad del problema. Además, la violencia afecta el sector turístico y genera miedo entre los ciudadanos, que temen salir de sus casas.

Medidas urgentes

Dimas advierte que la situación podría empeorar si las instituciones, lideradas por el alcalde Carlos Pinedo y con el apoyo del gobierno nacional, no implementan medidas urgentes para generar una respuesta efectiva.