Un sismo de magnitud 2.5 sacude Angostura, Antioquia
El Servicio Geológico Colombiano reportó un sismo de magnitud 2.5 en Angostura, Antioquia, a las 07:17 hora local. El evento sísmico, con profundidad superficial, no ha generado reportes de daños o víctimas hasta el momento.
Recomendaciones en caso de sismo
La Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD) recomienda seguir estas medidas en caso de un sismo:
- Mantener la calma y evacuar de manera ordenada.
- Alejarse de ventanas, objetos pesados y estructuras inestables.
- Ubicarse en zonas despejadas como parques o campos abiertos.
- Protegerse la cabeza y el cuello con los brazos o una almohada.
- Esperar a que pase el temblor y luego revisar si hay heridos o daños.
- Seguir las instrucciones de las autoridades.
¿Por qué suceden los sismos?
Los sismos son sacudidas que se producen por la liberación de energía acumulada y que se propagan en forma de ondas. Cuando estas llegan a la superficie, generan movimientos que las personas pueden percibir y que, de acuerdo a su nivel de intensidad, pueden derivar en daños sobre las estructuras y sobre la naturaleza (como agrietamientos y derrumbes).
Las causas principales de los sismos son:
- Movimientos de las placas tectónicas, que producen deformaciones y rupturas en las que, súbitamente, se libera energía acumulada.
- Actividad volcánica: tanto el fracturamiento de roca como el movimiento de fluidos al interior del volcán causan sismos volcánicos.
- Actividades humanas, como la extracción de recursos energéticos, el uso de agua en pozos profundos y la inyección de fluidos en el subsuelo.
Cómo se mide un sismo
La magnitud de un sismo se calcula utilizando datos recopilados a través de una serie de equipos que se encuentran en estaciones de monitoreo ubicadas a lo largo de un territorio. Estos registran los movimientos del terreno y, a partir de ellos, se calcula la energía sísmica liberada en la fuente.
La profundidad de un sismo se determina a partir de las diferencias en los tiempos de llegada de las ondas sísmicas a la superficie terrestre. Estas diferencias permiten localizar el epicentro del sismo y, por consiguiente, su profundidad.