Sismo de magnitud 3,3 sacude a Angostura, Antioquia

El Servicio Geológico Colombiano reporta un evento sísmico de baja profundidad en Angostura, Antioquia. El temblor tuvo una magnitud de 3,3 y se registró a las 10:25 a. m. de este viernes 10 de marzo de 2023.

¿Se sintió el temblor?

El Servicio Geológico Colombiano invita a los ciudadanos que hayan sentido el temblor a reportarlo en su página web o a través de sus redes sociales. Esta información es crucial para estimar rápidamente los efectos del evento ocurrido y es fundamental para que los organismos de atención de emergencias puedan responder adecuadamente.

Recomendaciones en caso de sismo

La Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD) recomienda a la población tomar las siguientes medidas en caso de un sismo:

  • Mantener la calma y no correr.
  • Alejarse de ventanas, puertas y objetos que puedan caer.
  • Ubicarse en zonas seguras, como debajo de mesas o marcos de puertas.
  • Después del sismo, revisar si hay heridos o daños y reportarlos a las autoridades.

Colombia, un país sísmicamente activo

Según el Servicio Geológico Colombiano, Colombia es un país sísmicamente activo debido a la interacción de diferentes placas tectónicas (Nazca, Sudamérica y Caribe). Esta dinámica geológica genera sismos en la mayor parte del territorio.

Se estima que en promedio ocurren 2.500 sismos al mes en Colombia, pero la mayoría de ellos no son perceptibles. Las zonas más activas sísmicamente son las costas del Pacífico y del Caribe, y alrededor de las cordilleras.

¿Por qué sentimos los sismos?

Sentir un sismo depende de varios factores, entre ellos la magnitud y la profundidad en la que se origina, así como la distancia del epicentro a la que se encuentran las personas. En caso de sentirlos, es clave reportar su ocurrencia, pues esto permite estimar rápidamente los efectos del evento ocurrido y es crucial para que los organismos de atención de emergencias puedan responder adecuadamente.

¿Cómo se miden los sismos?

La magnitud y la profundidad de un sismo se calculan utilizando datos recopilados a través de una serie de equipos que se encuentran en estaciones de monitoreo ubicadas a lo largo de un territorio. Estos registran los movimientos del terreno y, a partir de ellos, se calcula la energía sísmica liberada en la fuente del sismo.