Tragedia navideña: niño de 6 años muere tras ingerir pólvora en Santander
La alegría de la Navidad se convirtió en una tragedia en Barrancabermeja, Santander, donde un niño de apenas seis años perdió la vida tras consumir pólvora.
Una noche fatal
El pasado 15 de diciembre, el pequeño fue atendido en un centro asistencial del puerto petrolero con síntomas de intoxicación por pólvora. Sin embargo, debido a complicaciones en su salud, fue trasladado de urgencia a la clínica Foscal de Floridablanca, donde ingresó en grave estado.
A pesar de los esfuerzos del personal médico, el estado del niño continuó empeorando hasta que, lamentablemente, falleció.
Un llamado a la conciencia
De acuerdo con el secretario de Salud Distrital, Andrés Manosalva Camargo, el niño había consumido fósforo blanco, un componente altamente tóxico presente en algunos artefactos pirotécnicos.
"Seguimos insistiendo, enviando un mensaje contundente a los padres de familia, a los mayores de edad, alejemos a nuestros niños y niñas de la pólvora", señaló el funcionario.
"Entregar pólvora o permitir que los menores estén cerca de la pólvora es el mayor acto de irresponsabilidad", puntualizó.
Cifras alarmantes
Este es el primer caso de muerte por pólvora registrado en Colombia durante las fiestas decembrinas de 2023. Según las autoridades, en Santander se han reportado 12 personas quemadas durante esta temporada.
A nivel nacional, hasta el 11 de diciembre, se habían registrado 396 casos de quemados por pólvora, lo que representa un incremento del 10,3% en comparación con el mismo periodo del año anterior.
Patricia Gutiérrez, directora de la Unidad de Quemados del Hospital Simón Bolívar en Bogotá, hizo un llamado a las familias para evitar el uso de pólvora: "Les pedimos a todas y cada una de las familias que no les compren ni les den pólvora a sus hijos o hagan uso de ellas. Las secuelas y cicatrices son para toda la vida".
El peligro de la pólvora
Según el Instituto Nacional de Salud (INS), los artefactos pirotécnicos que causan mayor afectación son los voladores (21,6%), volcanes (11,7%) y cohetes (7,6%). El 63,1% de los afectados sufren quemaduras por manipular directamente la pólvora.