Pablo Sabbag, delantero colombiano de Alianza Lima, está causando revuelo en el mundo del fútbol al anunciar que optará por representar a la selección de Siria en la próxima Copa Asiática de la AFC 2024, marcando así un importante giro en su carrera deportiva. La noticia, revelada a través de sus redes sociales, ha sacudido no solo a los seguidores del Club Alianza Lima sino también a los espectadores del fútbol internacional, que esperan ansiosos su desempeño en el prestigioso torneo de selecciones.

El atacante de 26 años, nacido en Barranquilla y quien jugó con equipos como La Equidad y Deportivo Cali, agradeció en su comunicado a la Asociación de Fútbol de Siria y a las destacadas figuras de Abdul Rahman Al-Khatib y Firas Mualla por el esfuerzo realizado para hacer posible su incorporación a la selección, reflejando su compromiso y expectativas de cara a sus nuevos retos deportivos.

La Copa Asiática, que dará inicio en enero de 2024, representa una oportunidad singular para Sabbag, pero plantea un dilema a Alianza Lima, que podría no contar con su atacante para las primeras fechas de la Liga 1 Betsson. A pesar de haber extendido su préstamo con el equipo peruano para la próxima temporada, su participación en el certamen asiático podría solaparse con el calendario de la liga local.

Aún cuando Siria no figura entre las selecciones favoritas para alzarse con el título de la Copa Asiática, cualquier avance en el torneo podría significar una ausencia prolongada de Sabbag en los compromisos de Alianza Lima, teniendo en cuenta las etapas de octavos, cuartos, semifinal y final del certamen que se disputará en Qatar.

El compromiso de Pablo Sabbag con Siria inicia el 13 de enero contra Uzbekistán, prosigue frente a Australia el 18 y concluye la fase de grupos ante India el 23 del mismo mes. En caso de no avanzar a siguientes rondas, el colombiano podría reintegrarse a tiempo para el inicio de la Liga 1. Un dilema que sin duda plantea retos al club y al jugador.

Este giro en la carrera de Sabbag recuerda a otros futbolistas como Julián Quiñones, quien también cambió de selección nacional por falta de oportunidades. La decisión de jugar por Siria responde a una reflexión profunda de Sabbag sobre sus oportunidades de representar a Colombia, que veía cada vez más remotas.

La noticia ha generado una serie de reacciones entre la afición y los expertos del deporte, que perciben esta decisión como un paso arriesgado pero calculado en la búsqueda de Sabbag por asegurar su futuro internacional en el fútbol. Mientras tanto, Alianza Lima deberá buscar cómo compensar la posible ausencia de una de sus figuras más destacadas en el terreno de juego.