Víctor de Aldama: “Mi relación con Venezuela también está vinculada al tema del petróleo”
El empresario, expresidente del Zamora CF, declaró ante el juez que Luis Rubiales le prometió varios partidos de la Selección para compensarle por no otorgarle una plaza en Segunda División B.
El empresario Víctor de Aldama provocó este jueves un tsunami jurídico y político de consecuencias aún imprevisibles. Con su declaración en la Audiencia Nacional, donde precisó pagos al exministro socialista José Luis Ábalos y denunció mordidas a otros cargos del PSOE, el expresidente del Zamora CF logró quedar en libertad a las pocas horas.
En opinión de la Fiscalía Anticorrupción, su testimonio adquiere enorme valor en las pesquisas sobre el caso Koldo, que dirige el juez Ismael Moreno. Pero, durante el interrogatorio, el imputado fue un poco más allá y reveló algunos detalles de su vinculación con el sector del petróleo, que fue el que lo llevó realmente a prisión. “Tengo muchos contactos en el mundo del petróleo”, dijo ante el magistrado: “Mi relación con Venezuela viene en parte de ahí, que también está vinculado con el tema del petróleo”, remachó.
Aldama estaba encarcelado desde principios de octubre por su presunta implicación en otra red criminal dedicada al fraude de hidrocarburos —distinta a la que se cerca en el caso Koldo—. Pocos detalles han trascendido de esa segunda investigación, que dirige el juez Santiago Pedraz, que se encuentra bajo secreto de sumario y en la que el empresario aún no ha declarado. Pero ambas pesquisas se cruzan. De hecho, aunque el expresidente del Zamora se ofreció a volver a la Audiencia Nacional para declarar ante Pedraz sobre la trama del fuel, este jueves avanzó su relación con este mundo y con otro personaje clave, Claudio Rivas (encarcelado por los hidrocarburos) al que también se ha vinculado con Ábalos.
Según contó Aldama ante el juez Moreno, quien acordó de inmediato remitir la declaración del empresario a Pedraz, él se ha dedicado durante años a “conseguir clientes para las compañías” del mundo del petróleo. Su labor consistía en poner en contacto a distribuidoras con empresas suministradoras, según dijo. Es más, a preguntas de su abogado José Antonio Choclán, aseguró que desde 2008 tiene un contrato con una empresa que “compró dos bloques de petróleo en Nigeria”. “Mi relación con el petróleo no viene de Have Got Time ni de Villafuel, [dos sociedades vinculadas con Claudio Rivas], viene de mucho más atrás. Y mi relación con Venezuela viene en parte de ahí, que también está vinculado con el mundo del petróleo”, apostilló.
Los analistas de la Guardia Civil sostiene que Claudio Rivas, mediante la empresa Have Got Time SL, compró el chalé de La Línea de la Concepción (Cádiz) que usaba Ábalos. Los investigadores sospechan que Rivas ayudó a Aldama para adquirir esa vivienda en la ciudad gaditana para tejer una buena relación con el entonces ministro y su asesor Koldo García, con el objetivo de que posibilitaran que Villafuel obtuviera el título de “operadora de productos petrolíferos al por mayor”.
Según explicó Aldama este jueves, él conoció a Claudio Rivas por unos “temas de inversión e inmobiliarios”: “Rivas me compra el 50% de los restaurantes que hemos hablado antes de las Cuatro Torres”. A raíz de ahí extiende su relación a Villafuel, que está a nombre de la hermana de Rivas. ¿Para qué? “Para poder suministrar con el título de operador, [para] poder traer barcos de producto, sobre todo diésel. Y tenemos reuniones con proveedores para poder traer a través de Villafuel esos barcos e introducir ese combustible”, subrayó.
Durante su declaración en la Audiencia Nacional, Aldama también se refirió a Luis Rubiales, expresidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF). El exmandatario del Zamora CF afirmó que se contactó en 2019 con Rubiales, a raíz de que quedara una plaza libre en la Segunda División B, que aspiraba a quedarse para su club, pero que finalmente se adjudicó el FC Andorra, propiedad del exjugador Gerard Pique.
Aldama narró que esa decisión fue una “sorpresa”: “A mí me cabrea mucho”. Entonces, según añadió, recurrió a Koldo García para que moviera sus hilos y contactara con el Consejo Superior de Deportes (CSD) y con Luis Rubiales: “Él llama al CSD, llama a Rubiales... Y les dice: ‘Oye, ¿qué ha pasado aquí? El CSD le dice que no puedo hacer nada porque no es una cosa de ellos, que es un tema de la Federación. Y Rubiales básicamente le dice que ‘lo dejemos así' y que de alguna manera me ayudarán a tener dos partidos o tres partidos de la absoluta, de la selección absoluta femenina y de la sub 21 en Zamora, para de alguna manera compensar que no nos han dado la plaza. Yo le digo que se lo metan por el culo, obviamente. Entonces me llama el presidente Rubiales y me dice que lo entienda. Yo le digo que no quiero ni que me llamen, ni quiero entender nada, y que no entiendo por qué han hecho lo que han hecho. Cosa que luego más adelante, pues pude entender”, describió ante el juez.