Aerolíneas Argentinas ajusta sus alas: Fin de vuelos a Nueva York

La empresa, cuya gestión se encuentra ahora encabezada por Fabián Lombardo, ha visto en la racionalización de rutas y la optimización de su flota la válvula de escape para sostener una aerolínea que no recibiría más asistencia financiera estatal. Esta postura de recorte ya se ha reflejado en el cese de operaciones a La Habana el pasado 8 de marzo, y ahora Nueva York se suma a la lista. Ahondando en los cambios, la empresa ha puesto en marcha un programa de retiros voluntarios con la meta de reducir su planta de personal.

Impacto en el cabotaje y la visión a largo plazo

El escrutinio sobre el balance económico de la compañía es intenso, con debates que se han encendido en torno a la naturaleza de los informes financieros y los subsidios estatales. La reducción de los cargos jerárquicos y la suspensión de aportes del Estado desde enero ya son una realidad, en una empresa que debe adaptarse a un contexto de devaluación y a los criterios de eficiencia financiera que plantea el actual gobierno.