Impacto Económico Frente al Aumento en Tarifas de Transporte Público

El Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires ha anunciado un importante ajuste en las tarifas del Subte y Premetro, que regirá a partir de abril. Este aumento representa un cambio significativo, llevando el precio del pasaje de Subte a $574 en abril, con alzas progresivas que culminarán en $757 para junio, mientras que los usuarios sin SUBE nominalizada enfrentarán una tarifa de $859. El Premetro no se queda atrás con un incremento que lo situará en $200,90 en abril.

Este ajuste tarifario busca mantener cierta proporcionalidad con los costos del sistema de transporte, afectados por una inflación persistente. Sin embargo, esta medida no solo impacta los bolsillos de los usuarios, sino que también despierta un debate más amplio sobre la coordinación del transporte metropolitano y la accesibilidad al mismo.

Desde el punto de vista económico, es importante contextualizar estos aumentos teniendo en cuenta que la tarifa actual está desfasada respecto a los recientes ajustes en trenes y colectivos de jurisdicción nacional. Además, la pandemia ha dejado como secuela una disminución en los niveles de pasajeros del Subte que aún no se han recuperado. Estos factores, sumados al subsidio actual que no alcanza a cubrir los costos operativos completos, ponen en evidencia la complejidad del escenario económico porteño.

En paralelo, se ha planteado una actualización en las tarifas de peaje de la Ciudad, con un primer incremento del 150% en abril y uno adicional del 35% en junio. Esta actualización también es parte del esfuerzo por mantener el equilibrio económico y financiero necesario para la conservación de la infraestructura vial.

Las medidas tienen lugar en un contexto amplio de aumentos en servicios esenciales y preocupaciones económicas generales, como evidencia la lista de ajustes en combustibles, servicios públicos y otros bienes de consumo. En este escenario, tanto los ciudadanos como los expertos en economía ponen la mirada en el impacto real de estas decisiones en el poder adquisitivo y la calidad de vida de la población.

Esperando la Audiencia Pública

Una audiencia pública programada para el 15 de marzo será el marco donde se discutirán las propuestas tarifarias y se escucharán las voces de los ciudadanos. La inscripción para participar en este evento virtual ya está abierta, y se espera que la misma genere un espacio de diálogo y debate sobre el futuro inmediato del transporte porteño.

Los ciudadanos, economistas y especialistas aguardan esta instancia para profundizar sobre el impacto económico de los aumentos y la sostenibilidad del sistema de transporte público, en busca de una solución equitativa y viable para todos.

Inversiones y Proyectos en Espera

Pese a los aumentos anunciados, el Presupuesto 2024 del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires no presenta grandes inversiones en el sistema de transporte, más allá de la renovación parcial de la flota de la línea B, cuya licitación ha sido postergada. Esta situación genera incertidumbre en cuanto a la mejora del servicio y su correspondencia con las tarifas que los usuarios comenzarán a abonar.