La Unión Europea y China abren negociaciones sobre aranceles a vehículos eléctricos
El ministro de Economía de Alemania, Robert Habeck, declaró durante su visita a China este sábado que la Unión Europea (UE) está dispuesta a discutir los aranceles impuestos por la UE a las exportaciones chinas. "He transmitido a mis socios chinos que las puertas están abiertas para conversaciones y confío en que este mensaje haya sido recibido", afirmó en Shanghái tras reunirse con altos cargos chinos en Pekín.
La visita de Habeck es la primera de un líder europeo desde que Bruselas propuso aumentar los aranceles a las importaciones de vehículos eléctricos fabricados en China para combatir lo que la UE considera subsidios excesivos. Habeck señaló que hay tiempo para entablar un diálogo entre la UE y China antes de que las tasas entren en vigor en noviembre. El también vicecanciller alemán enfatizó su creencia en los mercados abiertos, pero insistió en que estos deben basarse en la igualdad de condiciones. "Los subsidios que tienen como objetivo demostrado aumentar las ventajas competitivas de las empresas exportadoras no son aceptables".
Tensión entre China y Europa por apoyo a Rusia
Otro punto de fricción entre Pekín y Berlín es el apoyo de China a Rusia en la guerra de Ucrania. Habeck señaló que el comercio chino con Rusia aumentó más del 40% el año pasado y advirtió a las autoridades chinas que estos intercambios comerciales estaban afectando negativamente sus relaciones económicas con Europa. "Evadir las sanciones impuestas a Rusia no es admisible", dijo, añadiendo que los bienes tecnológicos producidos en la UE no deberían terminar siendo utilizados en la guerra a través de otros países.
Aranceles provisionales hasta noviembre
Los aranceles provisionales de la UE, de hasta el 38,1%, a los vehículos eléctricos importados de China están previstos para el 4 de julio. La investigación continuará hasta el 2 de noviembre, cuando podrían imponerse aranceles definitivos, generalmente por cinco años.
"Esto inicia una fase en la que las negociaciones son posibles, las conversaciones son esenciales y el diálogo es necesario", afirmó Habeck. Los aranceles propuestos por la UE a los productos chinos no son un "castigo", aclaró Habeck a Pekín. "Es importante entender que no son aranceles punitivos", añadió. Países como Estados Unidos, Brasil y Turquía han recurrido a aranceles punitivos, pero según Habeck, la UE no lo hace: "Europa actúa de manera diferente".
El ministro señaló que la Comisión Europea había examinado en detalle durante nueve meses si las empresas chinas se habían beneficiado injustamente de los subsidios. Cualquier medida compensatoria que resulte de la revisión de la UE "no es un castigo", indicó, sino que dichas medidas estaban destinadas a contrarrestar las ventajas otorgadas a las empresas chinas por Pekín.
China defiende su industria energética
Zheng Shanjie, presidente de la Comisión Nacional de Desarrollo y Reforma de China, respondió: "Haremos todo lo posible para proteger a las empresas chinas. Los aranceles propuestos por la UE a los vehículos eléctricos fabricados en China perjudicarían a ambas partes". Además, recordó a Habeck que espera que Alemania demuestre su liderazgo dentro de la UE y "haga lo correcto".
Zheng también negó las acusaciones de subsidios injustos, afirmando que el desarrollo de la nueva industria energética de China es el resultado de ventajas en tecnología, mercado y cadenas de suministro industrial, fomentadas en una competencia feroz. El crecimiento de la industria "es el resultado de la competencia, no de subsidios y mucho menos de competencia desleal", dijo Zheng durante la reunión.
Tras su encuentro con Zheng, Habeck se reunió con el ministro de Comercio chino, Wang Wentao, quien manifestó que discutiría los aranceles con el Comisionado de Comercio de la UE, Valdis Dombrovskis, en una videoconferencia el sábado por la noche. "Hay margen de maniobra, hay espacio para el debate y confío en que se aprovechará este espacio", afirmó Habeck.