Desde el 1 de febrero, el ingreso mínimo integral en Venezuela experimentará un cambio significativo, alcanzando los 100 dólares. Esta cifra se desglosa en dos partes: 60 dólares correspondientes al bono contra la Guerra Económica y 40 dólares del bono de alimentación o cestaticket, excluyendo a los pensionados. Ambos montos estarán indexados, marcando un hito en las políticas salariales del país.

En la actualidad, según La Gaceta Oficial, el régimen de Nicolás Maduro mantiene el sueldo mínimo en 130 bolívares para los trabajadores del país. Este monto, que representa los ingresos mensuales más bajos en toda la región, equivale a 3.6 dólares estadounidenses según el cambio oficial del Banco Central de Venezuela.

El salario mínimo en Venezuela, aunque sufrirá un aumento, seguirá siendo el más bajo de la región. La incertidumbre entre la población persiste, y las redes sociales se llenan de preguntas sobre cómo este cambio impactará en la calidad de vida de los ciudadanos.

A finales de noviembre de 2023, Maduro expresó su compromiso con la recuperación de un "salario justo" y destacó la importancia de avanzar económicamente para garantizar el bienestar social, los derechos salariales y de los pensionados.

El último ajuste en el salario mínimo, según la Gaceta Oficial, data del 15 de marzo de 2022. Desde entonces, han pasado casi dos años, y el aumento actual apenas llega a las cuatro unidades en la moneda estadounidense.

El salario mínimo, como lo establecen las leyes laborales, representa la cantidad mínima que un empleador debe pagar a sus trabajadores, cubriendo sus necesidades básicas. Su incumplimiento puede generar tensiones y descontento en la sociedad.

Aunque Maduro ha anunciado medidas económicas para el año en curso, aún no se han implementado. La población espera con ansias ver cómo estas medidas afectarán positivamente la economía nacional.