Bayer se enfrenta a una condena millonaria por los efectos de su herbicida Roundup en EE.UU.

Un jurado en Georgia, Estados Unidos, está obligando al gigante farmacéutico alemán Bayer a desembolsar la asombrosa suma de 2.065 millones de dólares (aproximadamente 1.900 millones de euros). ¿La razón? Un demandante alega que el herbicida Roundup, fabricado por la compañía y que contiene glifosato, le causó cáncer. Según informes de Arnold & Itkin y Kline & Specter, los bufetes de abogados que representan al demandante, el veredicto incluye 65 millones de dólares en daños compensatorios y una impactante cantidad de 2.000 millones de dólares en daños punitivos. La noticia, que se dio a conocer el viernes por la noche, está generando ondas expansivas en la industria y plantea serias preguntas sobre el futuro de Roundup y la responsabilidad corporativa.

¿Qué es Roundup y por qué está en el centro de la polémica?

Roundup, el herbicida estrella de Bayer, contiene glifosato, un compuesto químico utilizado para eliminar malas hierbas. A pesar de su popularidad y extendido uso a nivel mundial, el glifosato ha sido objeto de controversia y escrutinio científico durante años. Diversos estudios han vinculado el glifosato con el desarrollo de cáncer, especialmente el linfoma no Hodgkin, lo que ha desatado una ola de demandas contra Bayer.

Bayer, por su parte, está defendiendo enérgicamente la seguridad de su producto. La compañía insiste en que los productos a base de glifosato son los herbicidas más investigados y utilizados en el mundo, destacando su eficacia, beneficios económicos y ambientales, y un «sólido perfil de seguridad». En un comunicado citado por Reuters, Bayer expresó su desacuerdo con el veredicto del jurado, argumentando que contradice las pruebas científicas y el consenso regulatorio global.

La respuesta de Bayer y el futuro legal de Roundup

La empresa no se está quedando de brazos cruzados. Bayer ha anunciado su intención de apelar el veredicto, calificándolo como uno de los más grandes en casos relacionados con Roundup. «Creemos que tenemos argumentos sólidos en la apelación para que se anule este veredicto y se eliminen o reduzcan las indemnizaciones por daños excesivas e inconstitucionales», declaró la compañía.

Este caso es solo la punta del iceberg. Bayer ya está lidiando con indemnizaciones que ascienden a unos 10.000 millones de dólares relacionadas con Roundup, producto que heredó tras la adquisición del gigante Monsanto en 2018 por la asombrosa cifra de 63.000 millones de dólares. Aunque ha ganado 17 de los 25 juicios sobre Roundup, las condenas multimillonarias en los casos perdidos están pesando sobre la compañía. Además, hay más de 60.000 casos pendientes, para los cuales Bayer ha reservado provisiones por aproximadamente 5.900 millones de dólares.

El impacto financiero en Bayer y las consecuencias a largo plazo

Las consecuencias financieras de esta batalla legal son significativas. Bayer cerró 2024 con pérdidas de 2.552 millones de euros, debido al ajuste de valor en su división Crop Science, que incluye Roundup. Si bien esto representa una ligera mejoría con respecto a las pérdidas de 2.941 millones de euros en 2023, la situación sigue siendo preocupante.

La cotización de Bayer en bolsa se ha visto duramente castigada desde la adquisición de Monsanto, en gran medida debido a los riesgos legales asociados con Roundup. De hecho, esta adquisición se convirtió en la mayor en los 150 años de historia de Bayer y la mayor operación de una empresa alemana, superando incluso la compra de Chrysler por parte de Daimler en 1998.

Miguel Jiménez, como autor de El País, ha seguido de cerca el caso, destacando la complejidad legal y financiera que rodea a Bayer y su herbicida Roundup. Según Ediciones EL PAÍS S.L., entidad publicadora de la noticia, la empresa se encuentra en una encrucijada, debiendo equilibrar la defensa de su producto estrella con las crecientes demandas y la presión pública.

¿Qué significa esto para el futuro de la agricultura y la salud pública?

Este caso plantea preguntas fundamentales sobre la regulación de pesticidas, la responsabilidad corporativa y la salud pública. Si bien Bayer defiende la seguridad de Roundup y su importancia para la agricultura moderna, los críticos argumentan que los riesgos para la salud humana y el medio ambiente superan los beneficios. La decisión final en la apelación de Bayer tendrá implicaciones significativas para la industria agrícola, los consumidores y el futuro del glifosato en todo el mundo.

Implicaciones para la industria:

  • Revisión de la regulación de pesticidas a nivel global.
  • Mayor escrutinio de los estudios de seguridad de productos químicos.
  • Aumento de la conciencia pública sobre los riesgos potenciales de los herbicidas.

Posibles escenarios futuros:

  • Bayer podría verse obligada a retirar Roundup del mercado o a modificar su fórmula.
  • Otros fabricantes de herbicidas podrían enfrentar demandas similares.
  • La agricultura podría experimentar una transición hacia prácticas más sostenibles y alternativas a los herbicidas químicos.

En resumen, la condena a Bayer por los efectos de Roundup es un claro recordatorio de la importancia de la responsabilidad corporativa y la necesidad de proteger la salud pública y el medio ambiente. El mundo está observando de cerca cómo se desarrolla esta historia, ya que el resultado final podría remodelar la forma en que cultivamos nuestros alimentos y cómo protegemos nuestro planeta.