El petróleo cae de los 80 dólares con el afán por perforar de Trump

Las promesas del nuevo presidente de Estados Unidos de llenar las reservas estratégicas de crudo del país "hasta el tope" hunden el precio del barril.

Reserva estratégica hasta el tope

El petróleo responde hoy con un descenso cercano al 1,5% y vuelve a cotizar por debajo de los 80 dólares. Comienza a evaporarse así el efecto alcista que causó la decisión de la administración Joe Biden de endurecer las sanciones a la industria petrolera rusa y que aupó el precio del crudo a inicios de este año a máximos de cinco meses.

El riesgo geopolítico que se espera con Trump, que también sopesa endurecer las condiciones para la exportación de crudo de Irán, apunta a quedar neutralizado con el impulso a la producción que se prevé de su mandato. Los analistas prevén de hecho un precio del petróleo más barato en 2025, en un descenso que ha comenzado hoy.

En su discurso de investidura, Trump ya planteó este lunes de forma meridiana su objetivo en materia estratégica. El presidente de EE UU prometió "bajar los precios, volver a llenar nuestras reservas estratégicas hasta el tope y exportar energía estadounidense a todo el mundo". El llenado de esas reservas estratégicas implica un fuerte impulso a la producción que va a reforzar el papel adquirido por EE UU como principal productor de crudo durante el mandato de Joe Biden, en lo que ha sido una respuesta estratégica al encarecimiento de la energía que causó la guerra de Ucrania y que se ha apoyado en la técnica de la facturación hidráulica o fracking.

La alfombra roja de Trump al petróleo

La reserva estratégica de petróleo de EE UU sufrió de hecho una reducción récord durante la administración Biden, que recurrió a la venta de 180 millones de barriles en el mercado mundial con el fin de intentar bajar los precios de la gasolina tras la invasión rusa de Ucrania en 2022. El expresidente demócrata comenzó a reponer lentamente ese depósito de emergencia, creado tras el embargo árabe de petróleo en los años 70, pero ya alcanzó el límite de adquisición, después de comprar unos 60 millones de barriles.

Ahora, se necesitaría una ley del Congreso para asignar más dinero a la cuenta de petróleo del Departamento de Energía, un cambio legal que no sería en principio un gran obstáculo para Trump. La reserva estratégica de petróleo de EE UU se sitúa actualmente en los 394,4 millones de barriles y tiene una capacidad máxima de 700 millones de barriles. El objetivo exhibido por Trump de llenarla supondría por tanto un incremento del 75% en las reservas estratégicas.

Trump también ha mostrado desde los primeros minutos de llegada al poder lo que ha calificado de "políticas de extremismo climático de Biden". Entre sus primeras medidas, ha firmado la retirada de EE UU del Acuerdo de París sobre el clima y ha revocado las prohibiciones de arrendamiento de petróleo y gas en alta mar que bloqueaban las perforaciones en la mayoría de las aguas costeras estadounidenses. Entre sus objetivos están también el llamamiento a la UE a comprar más petróleo de EE UU y una ofensiva contra las renovables, con la que poner fin "al arrendamiento de parques eólicos masivos que degradan los paisajes naturales y no sirven a los consumidores de energía estadounidenses". En definitiva, toda una alfombra roja de medidas para producir más petróleo y facilitar la extracción de crudo a las petroleras.

Las claves del precio del petróleo

Trump supone por tanto un claro factor a favor del descenso del precio del petróleo este año. En Bank of America estiman un precio medio para el Brent de 65 dólares el barril y en Citi calculan un descenso hasta los 60 a mediados de 2025. A favor de un crudo más barato también juega la menor demanda que se espera de China, la segunda mayor economía del mundo y en lucha permanente para evitar la desaceleración de su crecimiento. La demanda china de petróleo descenderá tras alcanzar un máximo de 770 millones de toneladas este año, según las estimaciones de la China National Petroleum Corporation (CNPC).

A favor de un repunte del precio del crudo juega en todo caso un factor que los expertos consideran puntual pero que es omnipresente, el riesgo geopolítico. Las nuevas sanciones de EE UU a las petroleras rusas han causado un alza en este inicio de año que llegó a causar preocupación por el suministro y al que se sumaba la posibilidad, también contemplada por los inversores, de que Trump sea más severo con las exportaciones de crudo de Irán. Sus aranceles son otra amenaza alcista para el petróleo. El nuevo presidente de EE UU ha dado aún pocos detalles de su ansia arancelaria, pero sí ha avanzado ya que un arancel del 25% para México y Canadá será inminente. EE UU importa cada día alrededor de 4 millones barriles de crudo de Canadá y los aranceles del 25% amenazan sin duda con encarecer la gasolina y la energía que consumen los estadounidenses. Trump está dispuesto a compensarlo con más producción y así parece recibirlo el mercado hoy.