Descensos de las petroleras

Esta cambiante materia prima afecta a las petroleras, que en los últimos años han incrementado su generosidad con los accionistas mediante dividendos crecientes y programas de recompra de acciones. El mercado prevé precios más bajos del petróleo, lo que podría afectar a la alta rentabilidad por dividendos y recompras.

Goldman Sachs estima que el rendimiento de las acciones (dividendos y recompras) de las grandes petroleras de la Unión Europea disminuirá del 12,7% actual al 11,7% en 2025 (con el crudo a 70 dólares), al 11,2% con un precio de 65 dólares y al 10,7% si se sitúa en 60 dólares el barril.

Las acciones de estas empresas ya reflejan un escenario de precios más bajos. Shell ha subido solo un 3,2% en el año, TotalEnergies un 0,6% y Repsol lidera las caídas con un recorte anual del 13%. BP ha retrocedido un 12% y Eni un 7%. Aramco, la petrolera saudí más importante del mundo, ha bajado un 15,5% en lo que va de año y cotiza actualmente por debajo de su precio de salida a Bolsa en diciembre de 2019.

Para Bank of America, esta mala evolución bursátil ya contempla un precio del petróleo de 70 dólares el barril. Sus valoraciones sugieren que la mayoría de las acciones de las grandes petroleras ya descuentan un escenario a largo plazo de 70 dólares.

Perspectivas de Goldman Sachs y Bank of America

Goldman Sachs presenta un escenario más optimista con un precio del crudo en 80 dólares el barril. Estima un rendimiento de dividendos de alrededor del 6,3% para las grandes petroleras de la UE y un rendimiento adicional del 6,6% por recompras.

Bank of America anticipa una caída media del 20% en el beneficio del sector para 2025 si el precio del petróleo se mantiene en 70 dólares el barril, llegando al 30% si baja a 60 dólares.

Planes de recompra de acciones

Los analistas no creen que un petróleo más barato ponga en peligro la rentabilidad por dividendo, pero sí advierten de una posible desaceleración o interrupción de las recompras de acciones.

Repsol anunció en la presentación de resultados del primer semestre un segundo programa de recompra de 20 millones de acciones para la segunda mitad del año, equivalentes al 1,7% del capital. Mantiene su compromiso de distribuir 0,975 euros por acción en dividendos para 2025, lo que supone un aumento del 8% y una rentabilidad por dividendo superior al 7% a precios actuales.

Bank of America considera que las grandes petroleras recortarán sus recompras el próximo año, excepto Shell, Total Energy y Equinor. Prevé una caída del 17,5% en las recompras en comparación con 2024. Repsol podría sufrir la mayor caída, hasta un 60%, si el petróleo cae a 60 dólares. Shell, por el contrario, destaca con un aumento de 2.000 millones de dólares en 2025 e incluso se mantendría estable en un escenario de 60 dólares.

Valoración de los analistas

Barclays destaca el atractivo de los programas de recompra de acciones de las grandes petroleras, ya que el flujo de caja libre del sector energético europeo se mantiene alto. BP se ha comprometido a recomprar 3.500 millones de dólares en el segundo semestre del año, TotalEnergies terminará su plan de 2.000 millones de dólares este mes, Eni acelerará un programa de recompra de 1.600 millones de euros y Galp recomprará 350 millones de euros.

El valor preferido de los analistas para este incierto devenir del precio del petróleo es Shell, ya que estaría mejor preparada para un descenso hasta los 60 dólares. JPMorgan le da un potencial de subida del 31% y destaca la solidez de su plan de recompra de acciones. Goldman Sachs también recomienda Shell por su resistencia en la retribución al accionista, su bajo punto de equilibrio y su desapalancamiento en curso.

TotalEnergies y Eni también reciben buenas valoraciones, así como Repsol, aunque los analistas son más cautos y han revisado a la baja sus precios objetivos. Sin embargo, destacan su compromiso de recompensar a los accionistas con dividendos y recompras.