El presidente del Banco Sabadell, Josep Oliu, niega cualquier negociación sobre una posible fusión con alguno de sus competidores en España, particularmente con Unicaja. Oliu afirma que la entidad se centrará en su crecimiento independiente, priorizando la rentabilidad y el valor de sus acciones, a pesar de las esperadas bajadas de los tipos de interés. Actualización del plan estratégico Oliu subraya que el banco continuará implementando su plan estratégico actual, con especial énfasis en la rentabilidad. Destaca que el objetivo es alcanzar un ROTE del 11,5% este año, superando o igualando el coste del capital. El presidente prevé un 2024 con "expectativas positivas" en este sentido. El consejero delegado, César González Bueno, indica que las subidas y bajadas del precio del dinero son bienvenidas siempre que no se entre en terreno negativo. Confía en que la caída de los márgenes provocada por las bajadas de tipos se compensará con un aumento del volumen, lo que impulsará un crecimiento más sostenible. "Creemos que, con tipos razonables, podemos experimentar un aumento de la demanda y un mayor crecimiento en las familias y empresas que se han desapalancado, lo que nos permitirá crecer y ser rentables", afirma González Bueno. Descarta la venta de TSB y el traslado de la sede Oliu también descarta una posible venta de TSB, el banco británico propiedad de Sabadell. Destaca que esta filial obtuvo unos beneficios de unos 200 millones de euros en 2023 y repartió un dividendo de 120 millones. "TSB tiene un potencial de beneficios superior y en tres años creemos que aportará más al banco. Ya no hay presión para vender TSB y no tenemos ningún movimiento en mente", asegura Oliu. Además, Oliu no contempla un regreso inminente de la sede social del Sabadell a Cataluña. El presidente afirma que el asunto no está "ni encima ni debajo de la mesa", a pesar del reciente acuerdo de investidura entre el PSOE y Junts. Sobre la posibilidad de que este pacto se traduzca en una ley que obligue a las empresas a trasladar su sede social o les imponga multas, Oliu asegura que "cumplirán escrupulosamente la ley".