El BCE baja los tipos de interés por segunda vez consecutiva, lo que no ocurría desde 2011

El Banco Central Europeo (BCE) ha vuelto a recortar los tipos de interés, esta vez en 25 puntos básicos, hasta el 3,25%. Es la segunda bajada consecutiva y la tercera en lo que va de año. La anterior vez que el BCE había recortado los tipos dos veces seguidas fue en 2011, cuando Mario Draghi estaba al frente de la institución.

El BCE sigue una estrategia más clara que otros grandes bancos centrales

La decisión del BCE supone un ejercicio de adaptación, ya que lleva meses repitiendo que no sigue una senda de tipos determinada. Sin embargo, los datos económicos han empujado al Consejo de Gobierno a pisar el acelerador. La inflación ya está en el 1,7%, su nivel más bajo desde abril de 2021, y por debajo del 2% objetivo de Fráncfort. Por otro lado, el crecimiento de la zona euro da síntomas preocupantes, con solo tres décimas en el primer trimestre y dos en el segundo.

El BCE considera que existe margen para seguir retirando los estímulos sin que ello implique sobrecalentar los precios. Incluso el empleo, uno de los factores clave de la resistencia de la economía, está empezando a mostrar algunas grietas.

El BCE prevé que la inflación aumente en los próximos meses y que luego descienda

El BCE ha reconocido que la caída de la inflación ha sido más rápida de lo previsto. Sin embargo, también ha advertido de que los riesgos para la inflación siguen siendo elevados, como las subidas salariales y los posibles repuntes de las tensiones comerciales.

El BCE prevé que la inflación aumente en los próximos meses y que luego descienda hasta el objetivo durante el próximo año. Aun así, dada la temporalidad del alza de precios, se espera que la racha de bajadas continúe durante un tiempo.

A pesar de la desaceleración del crecimiento, el BCE no cree que la zona euro vaya a entrar en recesión. La presidenta del BCE, Christine Lagarde, insistió en que “el mayor miembro [Alemania] esté afrontando circunstancias difíciles, no implica que toda la zona euro esté igualmente afectada”.

Sin embargo, el BCE reconoce que el orden global está cambiando y que hay una serie de riesgos geopolíticos que podrían afectar a la economía.

Principales conclusiones