El triunfo de Trump impulsa al bitcoin a superar los 82.000 dólares
El mercado de las criptomonedas está en auge, y el bitcoin no es una excepción. La criptomoneda líder ha superado este lunes los 82.000 dólares por primera vez en su historia, y sigue subiendo gracias a la victoria de Donald Trump en las elecciones presidenciales de Estados Unidos y a la bajada de los tipos de interés por parte de la Reserva Federal.
El impulso de Trump
Según Javier Cabrera, analista de mercados, la victoria de Trump ha sido el impulso decisivo para que el bitcoin alcance este nivel. "El activo estrella de este mercado, el bitcoin, se ha disparado un 18% desde los resultados electorales. Esto se debe a la abierta posición de Trump con respecto a este mercado, a diferencia de su posición en las elecciones de 2016, cuando era totalmente contrario", afirma.
De hecho, el republicano ha renegado por completo su pasado de criptoescéptico. Hace tan solo cinco años, en julio de 2019, tuiteaba en Twitter: "No soy un fan del bitcoin y de las otras criptomonedas, que no son dinero y cuyo valor es muy volátil y basado en la nada. Los activos cripto no regulados pueden facilitar conductas ilegales, incluyendo el tráfico de drogas y otras actividades ilícitas...".
Ahora, en cambio, se presenta como el salvador de una industria marcada por el rechazo de la Administración saliente y de los reguladores. El sector, en efecto, ha celebrado la victoria de Trump con la esperanza de que en EE UU se materialice un cambio de rumbo no solo en la regulación de la industria sino también en la postura hacia las criptos, que prevén sea más favorable.
Otros factores que impulsan el bitcoin
Además de la victoria de Trump, la bajada de los tipos de interés por parte de la Reserva Federal también ha contribuido a animar el mercado de las criptomonedas. Las tasas de interés bajas fomentan las inversiones a largo plazo, mientras que las altas favorecen las estrategias a corto plazo.
En el caso del bitcoin, una inversión de alto riesgo, se beneficia de los tipos bajos, ya que estimulan a los inversores a realizar movimientos más arriesgados, destaca Jorge Soriano, de Criptán.
Además, unas tasas más bajas unidas a las políticas propuestas por Trump, como las rebajas fiscales y el aumento de los aranceles que podrían ampliar el déficit público, reavivan los temores inflacionistas. En este caso, según los expertos, los inversores pueden recurrir a las criptomonedas para proteger su poder adquisitivo y debilitar el dólar, lo que hace probable que más ahorradores consideren los activos digitales como una reserva de valor alternativa.
Javier Molina, analista senior de mercados para eToro, incide en este aspecto: "Ante la expectativa de una mayor claridad normativa, bitcoin alcanza nuevos máximos, impulsado por el interés institucional y el creciente atractivo como activos de refugio frente a la inflación. Las perspectivas de políticas fiscales expansivas y una potencial rotación hacia bitcoin frente al oro consolidan su valor como activo estratégico".
El optimismo se contagia a otras criptomonedas
El optimismo ha contagiado a todos los activos digitales. Ethereum, la segunda criptomoneda más importante, repunta un 28% en la última semana, mientras que Solana lo hace un 29%. Las memecoins, las divisas que nacieron sin propósito económico y en ocasiones como broma, se disparan aún más. La reina del sector, dogecoin, alabada repetidamente por Elon Musk, uno de los hombres más cercanos a Trump, se revaloriza un 86% al calor de la posibilidad de que el fundador de Tesla tenga un cargo en la administración republicana.
En sus mítines, de hecho, encomendó al empresario una reforma drástica de la Administración: "Necesitamos el Departamento de Eficiencia Gubernamental", dijo subrayando sus siglas en inglés, DOGE, en referencia a dogecoin.
¿Hasta dónde puede llegar el bitcoin?
La próxima resistencia para el activo digital son los 85.000 dólares: si los supera, se considera que puede mirar hacia los 100.000. El experto se espera un 2025 "tremendamente alcista". "Los 250.000 dólares a finales del próximo año podrían no ser difíciles de alcanzar, lo que supone una capitalización de mercado de 4.500 billones de dólares, frente a los 1.600 actuales", asevera.
Todo esto si los mercados no viven eventos adversos como un recrudecimiento del conflicto bélico en Oriente Próximo, que podría lastrar el precio de este activo.