El bono estadounidense a 30 años escala al 4,85%, su nivel más alto desde 2023

El mercado de deuda estadounidense está experimentando una escalada en los rendimientos de los bonos a 30 años, que han alcanzado el 4,85%, su nivel más alto desde finales de 2023. Este aumento se produce en medio de preocupaciones sobre el repunte de la inflación y las posibles implicaciones de las políticas económicas del gobierno de Donald Trump.

Políticas de Trump y su impacto en la deuda

Los inversores están atentos a las señales relacionadas con los recortes de impuestos y los mayores aranceles comerciales que Trump ha propuesto. Estas medidas podrían acelerar la inflación y aumentar el déficit público, lo que llevaría a una pausa o desaceleración en los recortes de tipos de interés por parte de la Reserva Federal (Fed).

Implicaciones para la Reserva Federal

El repunte de la inflación podría complicar los planes de la Fed para flexibilizar la política monetaria. El banco central ha moderado sus expectativas de recortes de tasas en 2025, y los mercados ahora esperan solo una reducción durante este año.

Subastas del Tesoro

Las subastas del Tesoro previstas para esta semana centrarán la atención en la demanda de los inversores y en si los rendimientos se estabilizarán o seguirán subiendo. El Tesoro subastará 58.000 millones de dólares en bonos a tres años el lunes, seguido de bonos a 10 años el martes y bonos a 30 años el miércoles.

"Los inversores en bonos podrían estar enfrentando una dinámica de doble pérdida desde Washington", señaló un estratega del mercado a Bloomberg. "La aprobación fluida de grandes planes de gasto podría aumentar los rendimientos, pero también lo haría el caos político asociado con un posible regreso de las disputas sobre el techo de deuda".

Declaraciones de funcionarios de la Fed

Los comentarios recientes de los funcionarios de la Fed refuerzan esta perspectiva. La presidenta del Banco de la Reserva Federal de San Francisco, Mary Daly, indicó que los responsables de la política monetaria podrían mantener las tasas de interés estables al menos hasta mediados de 2025.

Los mercados de futuros reflejan este escenario, sugiriendo que no habrá recortes de tasas antes de junio. "Una reunión de diciembre de la Fed con tono restrictivo, sumada a las preocupaciones sobre el panorama fiscal de EE. UU., ha ejercido una presión al alza sobre los rendimientos", explicó Mohit Kumar, economista jefe de Jefferies International.