El desmembramiento de la globalización en tiempo real
El presidente de la Fundación Tällberg y Zemi Communications, Alan Stoga, afirma que la guerra comercial entre Estados Unidos y China es un claro ejemplo del "desmembramiento de la globalización en tiempo real". El estratega político explicó que la relación entre estos países se ha deteriorado considerablemente, lo que ha generado costos "algunos de los cuales no se pueden asumir".
Tensiones comerciales y políticas
Stoga destaca que la relación con China será uno de los temas más tensos en las próximas negociaciones del Tratado de Libre Comercio entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC). La definición de la política exterior y económica comercial entre los tres países deberá tener en cuenta la realidad geográfica y los intereses propios.
El estratega considera que existe un acuerdo bipartidista entre republicanos y demócratas sobre la necesidad de avanzar hacia una confrontación con China. También destaca que el fenómeno de la migración, aunque no forma parte del T-MEC, influirá en las discusiones y determinará el clima de las negociaciones.
Nearshoring y relocalización
Stoga enfatiza la importancia del nearshoring para combatir el cambio climático y garantizar la transparencia en la cadena de suministro. Considera que países como Estados Unidos y México deben priorizar la mano de obra de calidad en lugar de centrarse únicamente en costos laborales bajos.
El ex asesor principal de Kissinger Associates señala que relocalizar inversiones por mano de obra de menor costo es una razón equivocada. México, en su opinión, debería aspirar a vender mano de obra de excelencia.
Recomendaciones para México
Stoga recomienda a México adoptar una postura ofensiva en las negociaciones del T-MEC y buscar un proyecto positivo conjunto con Estados Unidos para retomar una visión unitaria. Considera que la falta de un proyecto común puede llevar a situaciones negativas y empeorar las relaciones entre ambos países.
Cambios políticos en Estados Unidos
El estratega político destaca los cambios significativos en los partidos políticos estadounidenses. Los demócratas ahora representan al "establishment" y los republicanos a los trabajadores.
"Los países no tienen amigos, tienen intereses, aliados y realidades geográficas. Esas son las tres cosas que deben determinar la política exterior, incluida la económica comercial", afirma Stoga.