El Gobierno presiona para solucionar la crisis de Talgo antes de finales de enero

El Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana se encuentra trabajando para resolver la crisis que afecta a la empresa ferroviaria Talgo. El pasado jueves, el departamento liderado por Óscar Puente convocó una reunión con representantes del Gobierno vasco, Sidenor y Trilantic Capital Partners para buscar un acuerdo que garantice el futuro de la compañía, mantenga su carácter español y preserve su capacidad de decisión dentro del país.

Una solución inminente

El Gobierno ha fijado un plazo de 21 días para encontrar una solución a la crisis de Talgo. El objetivo es alcanzar un acuerdo entre Sidenor, considerada la opción más adecuada, y Trilantic Capital Partners, el principal accionista de la empresa.

La españolidad de Talgo, una prioridad

El Gobierno, que cuenta con capacidad de veto gracias al escudo antiopas, ha manifestado su intención de mantener la españolidad de Talgo y su capacidad de decisión en España. Esta postura sitúa a Sidenor como la opción preferente frente a otras propuestas extranjeras.

Sidenor, la solución idónea

Sidenor, empresa siderúrgica presidida por José Antonio Jainaga, ha fijado un precio de 4 euros por acción, lo que supondría una valoración de Talgo un 20% inferior a la oferta realizada el año pasado por el consorcio húngaro Ganz-Mavag Europe. Sin embargo, esta cifra es un 20% superior a la cotización de Talgo en bolsa este mismo jueves.

Trilantic, un obstáculo en las negociaciones

Hasta el momento, no se ha alcanzado un acuerdo entre las partes, ya que Trilantic Capital Partners no está dispuesta a vender su participación al precio establecido por Sidenor. Ante esta situación, la firma está estudiando otras opciones, como la firma polaca PESA o el conglomerado indio Jupiter Wagons.

El interés de los accionistas

El ministro Óscar Puente ha señalado que, en el caso de Talgo, se trata de una empresa cotizada en la que deben tenerse en cuenta los intereses legítimos de sus accionistas. Sin embargo, la operación debe contar con el visto bueno del Gobierno, que ha mostrado una clara preferencia por la opción de Sidenor.

Urge una solución

Talgo se encuentra en una situación delicada, ya que ha experimentado un importante descenso en bolsa tras la desautorización por parte del Gobierno de la compra por parte de inversores húngaros, alegando razones de seguridad nacional. Los expertos advierten de que, si no se encuentra una solución pronto que permita a Talgo aumentar su capacidad industrial, la empresa podría verse abocada al fracaso.

El futuro de Talgo

El Gobierno central y el Ejecutivo vasco coinciden en que la mejor opción para garantizar el futuro de Talgo es Sidenor. Sin embargo, esta operación está supeditada a un acuerdo con Trilantic Capital Partners. El momento decisivo llegará cuando sea necesario aportar la financiación necesaria para tomar el control de Talgo, algo que, hasta el momento, nadie ha asumido.