El Gobierno reorganiza la administración nacional

El Gobierno nacional modificó el organigrama de la administración nacional a través del decreto 764/2024 publicado este miércoles en el Boletín Oficial. En el texto, el Ejecutivo renombró áreas y creó nuevas subsecretarías para la estructura organizativa de la Cancillería, la Jefatura de Gabinete y el Ministerio de Economía.

Cambios en el Ministerio de Relaciones Exteriores

En el Ministerio de Culto y Relaciones Internacionales, a cargo de la ministra Diana Mondino, se incorporaron dos subsecretarías: de Culto y de Asuntos Internacionales en Derechos Humanos y Civilización.

Reestructuración en la Jefatura de Gabinete

Por otro lado, el Gobierno oficializó el nuevo organigrama de la Jefatura de Gabinete de Ministros, a cargo de Guillermo Franco. Este quedó estructurado de la siguiente manera:

  • Secretaría General de la Presidencia
  • Secretaría de Coordinación Interministerial
  • Secretaría de Asuntos Estratégicos
  • Secretaría de Comunicación y Prensa
  • Secretaría Legal y Técnica

Modificaciones en el Ministerio de Economía

Los cambios también recayeron en el Ministerio de Economía, a cargo de Luis Caputo. Allí, además de un reordenamiento del organigrama, se creó la Unidad Ejecutora Especial Temporaria "Agencia de transformación de empresas públicas". Esta tendrá el objetivo de dirigir y coordinar todas las acciones en materia de desenvolvimiento de las empresas y activos del Estado.

Asimismo, se crearon para las nuevas dependencias nuevos cargos extraescalafonarios: Director Ejecutivo de Apoyo Legal, Director Ejecutivo de Procesos y Privatizaciones, Director Ejecutivo de Pliegos y Contratos Especiales, Director Ejecutivo de Articulación Laboral y Director Ejecutivo de Apoyo Societario y Relaciones Contractuales. Todos con rango de Director Nacional y remuneración equivalente al Nivel A, Grado 0, Función Ejecutiva Nivel 1852.

Impacto de los cambios

Estos cambios buscan optimizar la gestión de la administración pública y mejorar la eficiencia en la prestación de servicios a los ciudadanos. La reorganización permitirá una mayor coordinación entre los diferentes ministerios y secretarías, y una mejor articulación de las políticas públicas.