El Gobierno amplía su participación en Telefónica y alcanza el 8,01%

El Gobierno ha incrementado su participación en el capital social de Telefónica hasta superar el 8%, según ha notificado este martes a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). Concretamente, el Ejecutivo ha alcanzado una participación del 8,01%, tal y como ha detallado en un hecho relevante remitido al supervisor bursátil.

La Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI), a través de la cual el Estado ostenta su participación en Telefónica, ha comunicado esta ampliación de su presencia en el capital de la operadora pese a no estar obligada a ello. No obstante, ha facilitado esta información a la Comisión de Bolsa y Valores de Estados Unidos (SEC) en cumplimiento de la normativa vigente en dicho país.

La Sepi sigue avanzando en el mandato del Gobierno

Con este movimiento, la Sepi sigue avanzando en el mandato del Gobierno de adquirir hasta un 10% de la operadora presidida por José María Álvarez-Pallete. Esta estrategia se inició en reacción al sorpresivo desembarco de la teleco saudí STC en Telefónica el pasado mes de septiembre, cuando adquirió un 9,9% del capital social de la compañía española.

La Sepi ya había superado el 7% de Telefónica

El pasado 8 de mayo, la Sepi informó a la CNMV de que había sobrepasado el 7% del capital de Telefónica. En concreto, comunicó que su participación en la operadora era entonces del 7,079%, con un total de 407.050.664 acciones.

El mismo 8 de mayo, el máximo órgano de gobierno de Telefónica aceptó la propuesta de la Sepi de nombrar a Carlos Ocaña como consejero en su representación.

Telefónica, en el punto de mira de los inversores

La participación del Gobierno en Telefónica se produce en un momento en el que la operadora está en el punto de mira de los inversores. El pasado mes de abril, la compañía anunció un plan de reestructuración que incluye el despido de 2.700 empleados en España.

El plan de Telefónica también contempla la venta de activos no estratégicos, como su filial en Brasil, para reducir su deuda y mejorar su rentabilidad.