El peso mexicano se acerca a las 20 unidades por dólar, advierte Banco Base

El peso mexicano se está depreciando rápidamente frente al dólar estadounidense, y los analistas de Banco Base advierten que podría alcanzar las 20 unidades por dólar a finales de año. Este debilitamiento se debe a una serie de factores, entre ellos el bajo crecimiento económico, la alta inflación y el déficit presupuestario.

Factores que afectan al peso mexicano

El bajo crecimiento económico es uno de los principales factores que afectan al peso mexicano. La economía mexicana se ha desacelerado en los últimos años y se espera que crezca solo un 1,5% en 2023. Este lento crecimiento está reduciendo la demanda de pesos mexicanos y haciendo que la moneda sea menos valiosa.

La alta inflación también está afectando al peso mexicano. La inflación en México ha aumentado a su nivel más alto en 20 años y se espera que siga subiendo en los próximos meses. Esta inflación está erosionando el valor del peso mexicano y haciendo que sea más difícil para las empresas y los consumidores comprar bienes y servicios.

El déficit presupuestario también está poniendo presión sobre el peso mexicano. El gobierno mexicano ha estado gastando más dinero del que ingresa, y esto ha llevado a un déficit presupuestario cada vez mayor. Este déficit está aumentando la cantidad de pesos mexicanos en circulación y haciendo que la moneda sea menos valiosa.

¿Qué se puede hacer para evitar que el peso llegue a las 20 unidades por dólar?

El gobierno mexicano puede tomar una serie de medidas para evitar que el peso llegue a las 20 unidades por dólar. Estas medidas incluyen aumentar las tasas de interés, reducir el gasto público y aumentar los ingresos fiscales.

Aumentar las tasas de interés haría que los pesos mexicanos fueran más atractivos para los inversores, lo que aumentaría la demanda de la moneda y haría que sea más valiosa. Reducir el gasto público reduciría la cantidad de pesos mexicanos en circulación, lo que también haría que la moneda fuera más valiosa.

Aumentar los ingresos fiscales aumentaría la cantidad de dinero que el gobierno tiene disponible para gastar, lo que le permitiría reducir el déficit presupuestario. Esto también haría que el peso mexicano fuera más valioso.

Es importante señalar que estas medidas también tendrían algunos efectos negativos. Por ejemplo, aumentar las tasas de interés podría ralentizar el crecimiento económico y reducir la inflación, lo que dificultaría a las empresas invertir y expandirse. Reducir el gasto público podría conducir a recortes en programas sociales y otros servicios esenciales.

El gobierno mexicano deberá sopesar cuidadosamente los beneficios y los costos de estas medidas antes de tomar una decisión. Sin embargo, es evidente que se necesitan medidas para evitar que el peso mexicano llegue a las 20 unidades por dólar.