Codazos para comprar una vivienda: por qué hay gente que paga hasta un 10% más que el precio de venta

Comprar una vivienda en las principales ciudades españolas se ha convertido en una misión casi imposible. La escasez de oferta y el aumento de la demanda han provocado que los compradores estén dispuestos a pagar cada vez más dinero para hacerse con una casa.

El precio de la vivienda se dispara

Según un estudio reciente, el precio de la vivienda en España ha subido un 10% en el último año. Este aumento se debe, en gran medida, a la escasez de oferta. El número de viviendas disponibles en el mercado es cada vez menor, mientras que la demanda sigue aumentando.

La falta de oferta se debe a varios factores, entre ellos la paralización de la construcción durante la pandemia y el aumento de los costes de los materiales. Además, la demanda de vivienda está aumentando debido al bajo nivel de los tipos de interés, que hace más fácil para los compradores obtener una hipoteca.

Los compradores están dispuestos a pagar más

Ante la escasez de oferta y el aumento de la demanda, los compradores están dispuestos a pagar cada vez más dinero para hacerse con una vivienda. Según el estudio, el 5% de los compradores está dispuesto a pagar hasta un 10% más que el precio de venta.

Este aumento de precios está afectando especialmente al mercado de lujo. En el caso de los compradores internacionales de alto perfil o inversores, se han visto incrementos de hasta un 10% o 15% sobre el precio de venta original en propiedades de lujo o en ubicaciones muy solicitadas.

El caldo de cultivo

El caldo de cultivo de esta situación es un déficit nunca visto entre oferta y demanda. La cantidad de viviendas disponibles en las principales ciudades españolas es cada vez menor y, en cambio, sigue aumentando la cantidad de personas que buscan casa (obra nueva en mínimos, migración, inversores, compradores internacionales, dificultades para alquilar…).

El futuro del mercado inmobiliario

El futuro del mercado inmobiliario es incierto. Los expertos creen que los precios seguirán subiendo en el corto plazo, pero que podrían estabilizarse o incluso bajar en el largo plazo.

El aumento de los tipos de interés, que hará más difícil para los compradores obtener una hipoteca, podría ayudar a frenar el aumento de los precios. Sin embargo, la escasez de oferta seguirá siendo un problema importante.