El proteccionismo vuelve a la escena global
El proteccionismo, una política económica que busca proteger las industrias nacionales de la competencia extranjera mediante la imposición de aranceles y otras barreras comerciales, está resurgiendo en todo el mundo. Este retorno al proteccionismo está impulsado por una serie de factores, entre ellos el temor a las crisis financieras, la ruptura de las cadenas de suministro y el auge del regionalismo.
Aranceles y barreras comerciales en aumento
Desde noviembre de 2008, se han registrado más de 58.000 intervenciones gubernamentales discriminatorias contra el comercio internacional, según Global Trade Alert, el principal repositorio mundial de cambios de políticas que afectan al comercio y la inversión globales. De este total, más de la mitad se han registrado en los últimos cinco años. En cambio, el número de actuaciones que favorecen este intercambio se limita a poco más de 10.900.
Ningún país está exento de políticas intervencionistas, que van desde barreras arancelarias hasta subsidios locales. Algunos de los países con las tasas más altas de medidas proteccionistas son Brasil, Alemania, Canadá, Italia, Reino Unido, India, Francia y España.
China y Estados Unidos lideran la batalla comercial
Los principales impulsores del proteccionismo son China y Estados Unidos, dos de los países que más se han beneficiado del libre comercio y la globalización. La disputa comercial entre estos dos gigantes se remonta a años atrás, pero se ha intensificado recientemente con la imposición de nuevos aranceles y otras barreras comerciales.
En 2018, el entonces presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció la entrada en vigor de un arancel del 10% a una lista de 5.745 productos chinos valorados en 200.000 millones de dólares. Esta medida fue respondida por China con aranceles similares sobre productos estadounidenses.
La guerra comercial entre China y Estados Unidos ha tenido un impacto significativo en el comercio mundial y ha contribuido al aumento del proteccionismo en todo el mundo.
El auge del regionalismo y el debilitamiento de la OMC
Otro factor que está impulsando el proteccionismo es el auge del regionalismo. Los países están formando cada vez más bloques comerciales regionales, como la Unión Europea y el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN). Estos bloques comerciales suelen incluir aranceles preferenciales y otras ventajas para los miembros, lo que puede crear incentivos para el proteccionismo.
El debilitamiento de la Organización Mundial del Comercio (OMC) también ha contribuido al aumento del proteccionismo. La OMC es una organización internacional que establece las normas para el comercio internacional. Sin embargo, la OMC ha sido criticada por ser demasiado lenta e ineficaz para hacer frente a las nuevas tendencias del comercio mundial.
Implicaciones para el comercio global
El resurgimiento del proteccionismo tiene una serie de implicaciones para el comercio global. En primer lugar, puede conducir a precios más altos para los consumidores y las empresas. En segundo lugar, puede reducir el crecimiento económico al dificultar que las empresas exporten sus productos y servicios. En tercer lugar, puede conducir a una mayor inestabilidad política y económica, ya que los países se enfrentan entre sí por el acceso a los mercados.
Es importante señalar que el resurgimiento del proteccionismo no es un fenómeno nuevo. A lo largo de la historia, los países han utilizado a menudo políticas proteccionistas para proteger sus industrias nacionales. Sin embargo, el actual resurgimiento del proteccionismo es particularmente preocupante debido a su alcance y su potencial para dañar el comercio global.