El sector gasista reclama mercados de capacidad para garantizar la seguridad de suministro
El sector gasista ha exigido la implantación "rápida" de una normativa que permita el despliegue de mercados de capacidad para los ciclos combinados, una medida "urgente y necesaria" para garantizar la viabilidad económica de una tecnología que es "garante" de la seguridad de suministro en España. Además, ha reivindicado el papel de los gases renovables como "pieza clave" en la transición energética.
Los ciclos combinados, esenciales para la seguridad del suministro
En la rueda de prensa celebrada con motivo de la 50ª Reunión Anual de Sedigás, el presidente de la patronal, Joan Batalla, ha destacado que los ciclos combinados -que el año pasado cubrieron el 17% del 'mix' del sistema eléctrico, siendo la tercera tecnología que más aportó, y suponen unos 26 gigavatios (GW)- son "imprescindibles" para evitar "cualquier tipo de apagón" debido a la flexibilidad que aportan, lo que "les confiere un carácter estratégico".
A este respecto, ha subrayado que la importancia de los ciclos combinados para respaldar la seguridad de suministro no es "algo que diga Sedigás, sino que lo reconoce el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC)" del Gobierno para 2030.
"Se sigue manteniendo la necesidad de todo el parque de ciclos combinados", ha añadido, subrayando que esta tecnología ha visto cómo su papel ha pasado a ser muy diferente para el que fueron concebidos -en base a un mínimo de 4.000 horas al año-, y ahora deben realizar un proceso de arranques y paradas para aportar "flexibilidad y firmeza" al sistema en los momentos críticos.
El papel de los gases renovables en la descarbonización
Por su parte, el presidente ejecutivo de Naturgy, Francisco Reynés, ha pedido al Gobierno que dote urgentemente a los gases renovables, especialmente al biometano, de un marco regulador que "incentive la inversión", para que esta apuesta del sector gasista sea una realidad en el proceso de descarbonización.
En su participación en la 50ª Reunión Anual de Sedigás, Reynés ha considerado clave "regular algunas cosas que hoy en día son desincentivadores de la inversión" por no contar con un marco regulatorio. "No tener marcos estables es la condición más desincentivadora para no invertir", ha dicho.
Así, el presidente de Naturgy, primera gasista y tercera eléctrica, ha asegurado que es "urgente" que se promuevan los gases renovables, tanto con el respaldo de los inversores privados como desde la Administración.
"Hay que regular la inyección a la red, tanto para el transporte como la distribución, hay que buscar medidas que den un precio adecuado, que promuevan, gracias a esta fijación del precio, la inversión. Y también hay que promover el consumo. Y en el caso de los residuos, también hay que trabajar en exigir su tratamiento", ha añadido.
Y es que Reynés ha señalado que España es uno de los países que acumula a día de hoy más sanciones en términos de gestión de residuos. "Hay que impedir que se cobre por el residuo, que se tenga que pagar por él, porque esto contradice el principio fundamental de que quien contamina paga", ha advertido.
El ejecutivo de Naturgy, que ha estimado que contar con este marco regulatorio para los gases renovables permitiría al sector vivir "una nueva juventud", ha subrayado que el biometano podría cubrir más del 40% de la actual demanda nacional de gas natural.
Para ello, ha subrayado que "hay que poner la inversión a funcionar y hay que hacer plantas", unas 4.000 nuevas de gestión de residuos para la producción de biometano, frente a las apenas 10 que existen actualmente, ha cifrado.
En este sentido, habría que multiplicar por ocho los objetivos fijados por el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC) del Gobierno a 2030 o por tres los del paquete del Repower UE para estos gases renovables en el país, ha añadido.
"España tiene mucho potencial para ello, pero hoy está a la cola de Europa", ha dicho, señalando que Francia tiene más de 400 plantas de producción de biometano en operación, Alemania supera las 200 o Reino Unido las 100.
Además, Reynés ha mostrado su convicción de que la descarbonización "pasa claramente por compatibilizar electricidad y gas", para cumplir con los objetivos de garantizar la seguridad de suministro con un acceso a la energía para los clientes, tanto domésticos como industriales, cada vez "más limpia, más segura y más asequible".