Con la sanción de la Ley Bases, el Gobierno argentino avanza en la implementación del "silencio positivo" en más de 500 trámites administrativos a nivel nacional, simplificando así la relación entre ciudadanos y el Estado.
¿En qué consiste el silencio positivo?
Esta modalidad establece que, ante la falta de respuesta por parte de la administración pública en un plazo de 60 días, una solicitud ciudadana que cumpla con todos los requisitos formales se considerará aprobada automáticamente.
Beneficios del silencio positivo
El silencio positivo tiene como objetivo agilizar los procesos administrativos, reducir costos y tiempos, e incentivar la inversión al brindar certidumbre jurídica. Se espera que la implementación de esta medida reduzca las trabas burocráticas y mejore la eficiencia del Estado.
Aplicación gradual
La implementación del silencio positivo se aplicará de forma gradual en todas las áreas del Estado, comenzando por los trámites relacionados con licencias e inscripciones en registros públicos.
Áreas excluidas
En áreas de vital importancia como salud pública, medio ambiente y servicios públicos, donde el impacto social y ambiental requiere un control exhaustivo, el silencio positivo no será aplicable. En estos casos, la administración pública mantendrá su responsabilidad de revisión.
Capacitación y apoyo
El Poder Ejecutivo pondrá a disposición cursos de capacitación para abogados interesados en instruirse sobre la nueva normativa.
Reforma de empleo público
La implementación del silencio positivo se enmarca en una serie de medidas impulsadas por el ministro de Desregulación y Transformación del Estado, Federico Sturzenegger, para reducir el gasto público y mejorar la eficiencia del Estado. En este contexto, se ha iniciado un proceso de intimación a empleados públicos en condiciones de retiro para que inicien sus trámites jubilatorios, con el objetivo de recortar alrededor de 10.000 trabajadores.