El Gobierno elimina la Tasa de Seguridad de la Aviación para ciertos pasajeros
El Ministerio de Seguridad decidió eliminar la Tasa de Seguridad de la Aviación para los pasajeros que embarquen en aeronaves de transporte aéreo no regular, general, privado, afectadas a instrucción y entrenamiento, aeronaves de matrículas públicas nacionales o provinciales como las militares, policiales, aduaneras, aeronaves sanitarias y todo otra modalidad de transporte aéreo que no preste servicios comerciales regulares.
Según resaltó el Gobierno, la norma alcanzará a cientos de trabajadores, científicos, personal policial y militar, sanitario y aduanero que transitan diariamente por los aeropuertos y aeródromos que integran el Sistema Nacional.
Desde 2019, los vuelos charter han crecido en forma significativa en Argentina: un 60% según datos de la Administración Nacional de Aviación Civil (ANAC). Actualmente, se realizan unos 330 vuelos.
¿Qué implica la eliminación de la tasa?
Los pasajeros que embarquen en aeronaves que no estén destinadas a los denominados vuelos comerciales regulares, a futuro no se encontrarán alcanzados por la citada Tasa de Seguridad de la Aviación, ya que ello permite reducir una carga sobre actividades económicas y recreativas que por sus características, y en el marco de las nuevas políticas, no resulta ni motivado ni costo-eficiente imponerles la carga del pago de una Tasa.
Los sujetos alcanzados por la Tasa de Seguridad de la Aviación serán únicamente los pasajeros que embarquen en vuelos internacionales, regionales y/o de cabotaje de aeropuertos o aeródromos pertenecientes al Sistema Nacional de Aeropuertos de la REPÚBLICA ARGENTINA, a bordo de aeronaves destinadas al servicio aéreo de transporte regular.
¿Por qué se tomó esta decisión?
Esta medida se enmarca en la política del Gobierno de profundizar las políticas de desregulación del mercado interno, con el fin de simplificar, reducir cargas y costos, mejorando la vida al ciudadano y las empresas.
Además, se argumenta que los pasajeros que embarquen en aeronaves que no estén destinadas a los denominados vuelos comerciales regulares, no se encontrarán alcanzados por la citada Tasa de Seguridad de la Aviación, ya que ello permite reducir una carga sobre actividades económicas y recreativas que por sus características, y en el marco de las nuevas políticas, no resulta ni motivado ni costo-eficiente imponerles la carga del pago de una Tasa.
Esta decisión se toma luego de que el Gobierno anunciara una suba del 22,3% en la tasa de protección al vuelo en ruta y en la tasa de apoyo al aterrizaje, lo que resultará en un encarecimiento de los pasajes de avión hacia destinos internacionales.
Estas dos tasas estaban congeladas desde 2018.